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Por Wendy Vázquez
Publicado el miércoles, 12 de julio del 2017 a las 09:00
Monclova, Coah.- Una menor de cinco años de edad sufrió una descarga eléctrica y estuvo a punto de sufrir un infarto en el kínder 21 de Marzo de la colonia Bellavista de Ciudad Frontera, ante la falta de precaución del plantel de tener los cables de la toma eléctrica en mal estado.
Los hechos ocurrieron la mañana del lunes, sin embargo, fue hasta ayer que la pequeña recibió atención médica pues la mamá ignoró los hechos hasta que observó una excoriación en el talón de su hija, ya que de acuerdo con la familia de la menor, la directora del jardín de niños prefirió ocultar lo que pasó.
De acuerdo a lo relatado a Zócalo de Monclova por Mirna Moreno, madre de la menor, el lunes 10 de junio aproximadamente a las 11 de la mañana llegó al kínder con motivo de una junta de padres de familia. Al arribar al lugar otras madres de familia le gritaban que al parecer su hija había quedado atorada entre la barda de la escuela y la mufa de energía eléctrica, por lo que de inmediato corrió al lugar pero su hija ya había salido de ese sitio y se veía algo asustada.
Al interrogar a la directora y docentes sólo atinaron a decir que la niña estaba atorada en ese lugar pero ya había podido salir, sin embargo, la madre exigía una explicación mayor porque entre algunas personas que estaban antes de que llegara a la escuela alcanzaron a oír y sacarla del lugar cuando la niña gritaba; “me voy, me voy al cielo”.
La madre al revisar el lugar vio que había unos cables sueltos pero la directora sólo expresó que ya no tenían corriente eléctrica, más tarde acudieron de nueva cuenta y un electricista les confirmó que sí había energía en ese sitio.
“Le preguntaba a mi niña y no me decía nada, pero en la mañana le vi una excoriación en el talón y acudimos de inmediato al médico, ahí fue cuando la doctora me dijo que le entró una descarga al cuerpo y le salió por el talón”.
“De hecho nos cuestionó porqué no la habíamos atendido ayer (lunes) pues pudo haber sufrido un infarto, pero nosotros lo ignorábamos, la directora no nos dijo nada, y es algo muy grave que esté esto así en el kínder”, mencionó la afligida madre de familia.
‘Me voy al cielo’, gritaba la pequeña
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