Francia.- Cuatro ministros franceses dimitieron en tres días, entre ellos el ministro de Justicia, François Bayrou, aliado clave del presidente Emmanuel Macron, por investigaciones judiciales que chocan con la moralización de la vida pública promovida por el nuevo mandatario.

Desde su victoria el domingo en las elecciones legislativas, que el brindaron una clara mayoría, Macron prepara un nuevo ejecutivo, cuya composición se conocerá este miércoles.

Se esperaban pocos cambios en el segundo gobierno del primer ministro Edouard Philippe, pero con la dimisión de esos ministros, serán más importantes de lo previsto.

La inesperada renuncia de la ministra de Defensa, Sylvie Goulard, el martes, implicada en un caso de presuntos empleos ficticios en el Parlamento Europeo, desencadenó las demás dimisiones, estimaron los medios de prensa este miércoles.

Los ministros de Justicia, François Bayrou, y la ministra de Relaciones Europeas, Marielle de Sarnez, miembros del mismo partido que Goulard, el centrista Movimiento Demócrata (MoDem), renunciaron a su cargo este miércoles.

La investigación abierta el 9 de junio intenta determinar si el partido dio trabajo a colaboradores en Francia, pagándolos con dinero del Parlamento Europeo, mediante contratos de asistentes parlamentarios europeos.

Caso incómodo

El caso es especialmente incómodo para Bayrou, el encargado de elaborar una ley para la moralización de la vida pública, uno de los objetivos prioritarios del nuevo presidente.

“He tomado la decisión de no formar parte del próximo Gobierno”, declaró Bayrou este miércoles a la AFP, asegurando que nadie le había impuesto esa dimisión.

Poco después, una fuente del MoDem anunció que Marielle de Sarnez, ministra de Asuntos Europeos, iba a dedicarse a la presidencia del grupo de su partido en la Asamblea Nacional.

Tanto Bayrou como Marielle de Sarnez podrían comparecer ante la justicia en el marco de la investigación sobre los presuntos empleos ficticios en el seno del partido centrista.

La víspera, Goulard había anunciado su dimisión para poder “demostrar libremente (su) buena fe” en dicha investigación.

Gobierno equilibrado

Otro ministro, Richard Ferrand, un exsocialista elegido diputado del movimiento presidencial La República en Marcha, también dimitió tras haberse resistido a hacerlo durante semanas.

Ferrand, que acompañó a Macron en su conquista del poder, es objeto de una investigación preliminar por sospechas de que favoreció a su mujer en una operación inmobiliaria.

Tras la salida de los tres únicos ministros del MoDem, falta por ver cuál será la participación del partido centrista en el nuevo Gobierno, que anunciará el primer ministro, Édouard Philippe, este miércoles, antes de las 18H00 (16H00 GMT).

La marcha de Bayrou es “una elección personal” que “simplifica la situación”, consideró el portavoz del gobierno, Christophe Castaner, que explicó que el ministro de Justicia deseaba “defenderse” en el caso de los asistentes parlamentarios del MoDem.

El segundo gobierno compuesto por Philippe, miembro del partido conservador Los Republicanos, será “equilibrado” y se compondrá de “gente procedente de la derecha, la izquierda, el centro, gente cuya legitimidad no resulte de un compromiso partidario”, según los deseos del primer ministro.