Washington.- El presidente estadunidense Donald Trump recibió hoy el fuego combinado de demócratas, republicanos, empresarios, líderes comunitarios y activistas, ante versiones de prensa de que dará por terminado el programa DACA con una tregua de 6 meses para sus beneficiarios.

Aunque fuentes de la Casa Blanca indicaron que la decisión no estaba “escrita en piedra” y que Trump podría cambiar o matizar su decisión de último momento, el presidente recibió una ola de presiones para evitar poner fin el programa que protege a 800 mil jóvenes indocumentados, los llamados “dreamers”.

“Tenemos que luchar con todo lo que tenemos para defender el DACA”, escribió la exprimera dama de Estados Unidos y excandidata demócrata Hillary Clinton, en su cuenta de Twitter.

Personas allegadas al expresidente Barack Obama, quien firmó la orden ejecutiva para la creación del DACA en junio de 2012, deslizaron a medios informativos que el exmandatario dará un mensaje mañana martes en Facebook y Twitter, en caso que Trump rescinda el programa.

“Si Trump termina el DACA, el Congreso debe actuar de inmediato para restaurarlo”, señaló el senador demócrata de Vermont y exaspirante presidencial Bernie Sanders.

Las críticas a Trump no sólo provinieron de los demócratas, sino de legisladores de su propio Partido Republicano, quienes le reclamaron el aparente incumplimiento de su promesa de buscar una solución “de corazón” para los ‘dreamers’.

“Lidiar con los ‘dreamers’ con ‘gran corazón’ no está reflejado en el plan del presidente”, lamentó la republicana de Florida Ileana Ros-Lehtinen,

El senador republicano de Arizona, Jeff Flake, quien protagonizó varias escaramuzas retóricas con Trump durante la campaña electoral, deploró el inminente fin del DACA, al decir a la cadena CNN que los jóvenes “no deben ser castigados por los pecados de sus padres. Ese es un principio básico que debemos seguir”.

Mike Coffman, representante republicano de Colorado, anunció que mañana presentará una moción legislativa a fin de forzar al Congreso a votar la llamada Ley Bridge, que daría a los ‘dreamers’ una protección especial de tres años, aunque sin una ruta para obtener la ciudadanía.

Si Coffman y los legisladores partidarios del DACA logran conjuntar 218 firmas, pueden forzar a que se vote la Ley Bridge en el pleno de la Cámara de Representantes.

La Casa Blanca se mantuvo silenciosa a pesar de la avalancha de críticas que comenzaron desde el domingo por la noche en las redes sociales.

“250 de mis compañeros en (la compañía) Apple son ‘dreamers’. Estoy con ellos. Merecen el respeto como iguales y una solución enraizada en los valores estadounidenses”, escribió Tim Cook, directivo de la empresa, en su cuenta de Twitter.

Javier Palomarez, presidente de la Cámara de Comercio Hispana de Estados Unidos y quien forma parte del Consejo de Diversidad de la Casa Blanca, dijo que renunciará al Consejo si Trump firma la cancelación del DACA.

Cientos de miembros de la organización Casa Maryland tienen previsto realizar el martes una manifestación frente a la Casa Blanca para defender al DACA y después marchar hacia el cuartel central de la Oficina de Aduanas y Migración (ICE).