Radio Fórmula | Monterrey.- Aún es grave pero estable el estado de salud de los dos alumnos y la maestra heridos el pasado miércoles por un joven en el Colegio Americano del Noreste, en Monterrey, Nuevo León, según confirmó el vocero de seguridad estatal, Aldo Fasci.

El funcionario estatal pidió esperar otros cuatro días para revisar la inflación que tienen “en el cerebro para poder dar un pronóstico por parte de los médicos.”

Entrevistado en el noticiero ‘Atando Cabos’, Fasci fue cuestionado si la operación realizada esta madrugada a uno de los lesionados resultó satisfactoria, dijo que así fue sólo, insistió, queda esperar.

Aclaró que existe optimismo por parte de los médicos hacia el estado de salud de los tres heridos.

Indicó que los órganos del agresor, como hígado y riñones, ya fueron trasplantados “exitosamente” sólo falta confirmar el de córneas, dijo el vocero de seguridad neoleonés.

Reiteró que la pistola que utilizó el joven, y otras más que tiene el padre del menor, son legales y están “bajo resguardo” y son de uso permitido, registradas, incluida la calibre .22, con lo cual negó que hubiera sido adquirida “en el mercado negro”. También dijo que ninguna está relacionada con algún hecho delictivo.

Dijo que aún no ha sido identificada la persona que filtró el video del momento en que el joven disparó contra sus compañeros y la maestra. “Se aseguraron los teléfonos de los policías que intervinieron y no ha aparecido nada. Se necesitan órdenes judiciales para obtener los teléfonos de otras personas que estuvieron ahí.”

Empero, dijo que hay un problema para aclarar la situación porque es competencia federal conseguir la información sobre los móviles. “Estamos en contacto con la autoridad y daría más claridad porque imaginen que haya sido un policía nuestro, que no lo descarto, sería mucho mejor que una autoridad distinta haga la investigación.”

Estimó que hay menos de ocho policías que participaron en los primeros minutos del día de los hechos, pero los teléfonos móviles ya fueron revisados y no arrojaron nada.