Saltillo, Coahuila.- Luego de los diversos conflictos en los que se han visto involucradas pandillas que operan en al ciudad de Saltillo, el obispo Raúl Vera, contradijo las declaraciones del Alcalde quien comenta que no se debe satanizar a estos grupos.

Jóvenes no tienen oportunidades: Raúl Vera López

Ante la crisis de seguridad que se vive en Saltillo donde las riñas han ocasionado muertes y daños materiales en diferentes colonias de Saltillo, el obispo Raúl Vera López decidió poner a trabajar a sus párrocos y activar un plan especial para atender la situación.

“Vamos a tratar (de que haya orden), hay parroquias que sí tienen atención con las pandillas; aquí hubo una parroquia que tuvo un proyecto para los pandilleros, voy a ver si lo activo, incluso yo fui a dar retiros a pandilleros”, señaló el titular de la Diócesis local.

Vera López fue puntual al señalar que identificará las parroquias en las que la problemática sea mayor, con el fin de hablar con los sacerdotes para atender a los jóvenes.

Aseguró que la situación deriva del sistema excluyente del país, por lo que pondrán especial atención en las parroquias para atender y enfrentar este fenómeno. Vera López culpó al actual sistema político y económico, pues los jóvenes tienen cada vez menores oportunidades de desarrollo.

Hay bandas que si han tenido éxito: Isidro López Villarreal

Ante el alza de lesiones y muertes dolosas por riñas entre pandilleros, el alcalde Isidro López Villarreal pidió no satanizar a estos grupos de la calle.

“No hay que tener (una unidad de la Policía) antipandillas por unos que no se comportan bien. Hay algunas pandillas que son exitosas y hacen que sus colonias crezcan. Necesitan apoyos, allí debemos trabajar”, dijo.

La Dirección de Policía Preventiva y Tránsito Municipal tiene registradas a 27 pandillas como altamente agresivas, tres de las cuales operan dentro del Centro Histórico, donde recientemente asesinaron a un padre de familia y balearon a un jovencito de 16 años.

Aunque el Ayuntamiento disolvió el grupo antipandillas con el que contaba y organizó el programa Tirando Barrio para orientar a los jóvenes que conforman estos grupos callejeros, dichas acciones han dejado muy pocos o nulos resultados.