Saltillo, Coahuila.- Las aplicaciones digitales para buscar pareja se han popularizado y desvirtuado en Saltillo, de tal manera que algunas de ellas sirven hoy en día para organizar orgías, ofrecer servicios sexuales, invitar a fiestas clandestinas y vender drogas afrodisiacas de dudosa regulación.

Zócalo Saltillo realizó un ejercicio periodístico con dos semanas de seguimiento al interior de la aplicación Grindr, donde se pudo probar que aun cuando se trata de una plataforma de uso exclusivo para mayores de edad, también hay menores de 16 años buscando relaciones sexuales y expuestos al ambiente de la aplicación.

Grindr es usada por hombres para buscar parejas del mismo sexo, y a pesar de que la mayoría le da el uso debido, no hay que indagar mucho para encontrar a vendedores de poppers (droga estimulante) o ser invitado a fiestas con cover, donde “se permite y hay de todo”.

La aplicación funciona mediante tu ubicación, te geolocaliza y pone en contacto con los usuarios que estén cerca de ti para que platiques con ellos en chats privados. Grindr es gratuito y no te pide ningún documento que certifique tu mayoría de edad para ingresar.

En sólo un clic al submundo digital

Para sondear a toda la ciudad con seguimiento a la aplicación Grindr, Zócalo abrió dos semanas una cuenta y recorrió Saltillo para ubicar a más de 200 usuarios.

El uso de la app es legal, las irregularidades son que dentro de la misma, fueron identificados tres personas, dos en la zona centro y una en el norte que sin fotografía ofrecen venta de poppers, una droga química usada principalmente (pero no de forma exclusiva) por la comunidad LGBTI para “potenciar el placer sexual”.

Leyendo los perfiles y conversando con algunos usuarios se constató la filtración de adolescentes que participan en la aplicación: dos fueron encontrados en la Zona Centro y otro par en el cinturón oriente de la ciudad.

Entre las características de la aplicación está que puedes registrar tu peso, estatura, situación amorosa, intereses, estado de VIH (positivo o negativo) y la edad para que el resto de los usuarios pueda verla, quienes son menores mienten para poder registrarse porque la aplicación sólo acepta a mayores de 18.

Durante las dos semanas del ejercicio periodístico, Zócalo (que ingresó con una cuenta sin fotografía ni datos personales), fue invitado a dos fiestas clandestinas, una para celebrarse en el norte de la ciudad y otra en el Centro, con cover de 100 pesos ambas, y el principal atractivo de los encuentros es que se puede “ligar” o “tener orgías”.

Así como se encuentran este tipo de invitaciones y ventas, la aplicación tiene (una mayoría) de usuarios que le dan uso adecuado y solamente buscan socializar y conocer nuevos contactos.