Culiacán, Sin.- En los últimos tres meses cientos de habitantes abandonaron y se desplazaron a otros lugares de la zona serrana de Sinaloa, debido a que la lucha por el control de la siembra y tráfico de enervantes aumentó recientemente, lo que provocó una guerra sin tregua en el lugar.

Uno de los municipios afectados es el Concordia de donde escaparon 755 familias de diversas comunidades serranas, lo anterior luego de que en el poblado La Petaca sus habitantes aseguraran que hombres
armados llegaron para amenazarlos con matarlos si no dejaban sus viviendas.

De igual forma comunidades como Chirimoyo, Santa Lucia, La Capilla, El Coco y La Guayanera quedaron vacíos por temor a que grupos armados cumplieran sus amenazas.

Según habitantes del lugar, tras el registro de esos hechos y el desplazamiento más pobladores se asustaron y comenzaron a huir. “En las noches se acostaba uno y escuchaba ladrar los perros porque venían otra vez los grupos, aquí se paseaban en las calles como si nada, la gente tuvo miedo y prefirió salirse, yo también me salí”, relató Jesús Venegas, poblador de La Petaca.

Según información extraoficial sólo 54% de los pobladores regresó a sus comunidades en la sierra de Concordia, pero el conflicto se ha extendido a los municipios de El Rosario y San Ignacio.

Otro de los casos que más ha impactado es la comunidad de Pánuco el cuál ya es considerado pueblo fantasma debido a que sus 300 pobladores huyeron, por aparentemente ente recibir amenazas.

Llegar no es nada sencillo, debe hacerse por caminos estrechos y de terracería, cruzar algunos arroyos y zonas de deslaves; en todo el trayecto no hay servicio de telefonía o radio
comunicación.

De acuerdo con los últimos censos realizados aún quedan 336 familias sin poder regresar a sus comunidades, lo que representa más de mil 300 personas, pero algunas evitaron tener contacto con las autoridades por lo que el número de afectados podría ser mayor.