Saltillo, Coah.- Hace un par de años, quizá más, el miedo se apoderó de Saltillo. Con las balaceras, los desaparecidos, extorsiones, bloqueos, cuerpos colgados, vehículos sospechosos y adolescentes en moto hablando por radio, pocos se dieron cuenta de que las pandillas de barrio casi desaparecieron.

No es una simple percepción, lo dicen las cifras. En 2010, por ejemplo, existían en Saltillo 450 pandillas, según el desaparecido Icojuve. Para 2014 la cifra se elevó a 770, de acuerdo con el Centro de Integración Juvenil, pero ese número disminuyó para este 2017, pues el área de Inteligencia de la Policía Municipal reporta que sobreviven 333 pandillas en la ciudad.

¿Qué fue de las 437 pandillas que desaparecieron? ¿Qué pasó con los más de 20 mil pandilleros si consideramos un promedio de 50 integrantes por pandilla? Eduardo Patricio, “El Beby”, habló con el periodista Néstor González sobre cómo el crimen organizado los reclutó como carne de cañón. El joven es sobreviviente de aquella cacería que los grupos delictivos hicieron en los barrios, buscando a los más bravos, a los líderes de pandilla, y luego a la tropa, esa que se compraba con billetes o se hacía trabajar a la fuerza. De ese submundo “El Beby” salió vivo para contarlo.