Saltillo, Coah.- Las palabras, los símbolos culturales y la fantasía eran las materias primas con las que el escritor, filósofo y profesor italiano Umberto Eco trabajaba en sus libros, en donde los estudios de lugares que nunca existieron pasaban a formar novelas en donde el misterio llenaba cada una de las páginas de las que estaba conformado el libro.

Eco nació en la ciudad italiana de Alessandria el 5 de enero de 1932, hijo de un contador y de una ama de casa. Se doctoró en lFilosofía y Letras en la Universidad de Turín durante el año de 1954, con la tesis llamada El Problema Estético en Santo Tomás de Aquino, texto que contendría varios de los principales rasgos de los trabajos académicos y narrativos del escritor, los cuales eran el interés en la época medieval y la filosofía de Tomás de Aquino.

Eco fue un devorador de libros y dueño de una vasta biblioteca. El italiano encontraría a una figura que seguir en el escritor argentino Jorge Luis Borges, quien fuera una de sus influencias más marcadas y a quien le rendiría un homenaje, convirtiéndolo en uno de los personajes principales de su más famosa novela.

Con este amor que tenía por los libros como un medio de comunicación llegó a decir alguna vez en una entrevista que “Los que dicen que escriben para sí mismos se equivocan. Se escribe para los demás. Se escribe como un acto de comunicación. Pero no se escribe para los lectores que existen, sino para los lectores que no existen aún, que se quieren formar, que se quieren construir”.

Umberto Eco, quien recibiría la medalla del Príncipe de Asturias en Comunicación y Humanidades en el 2000, moriría en Milán, el 19 de febrero de 2016 debido a un cáncer.

ANÁLISIS DE MASAS

La importancia de Eco, como pensador en la modernidad parte de su preocupación sobre la moralidad y el avance de la sociedad y la cultura. Preocupaciones que eran constantes temas dentro de sus ensayos y tratados filosóficos, así como en el resto de sus obras.

Entre sus libros de ensayos se encuentra Apocalípticos e Integrados, un estudio sobre las masas en donde Eco divide a los hombres en dos tipos de hombres modernos: los apocalípticos, quien ve la muerte en la cultura actual y el Integrado, personas que de manera optimista ve el futuro en la cultura global.

Cinco Escritos Morales es otra de sus obras principales en cuanto a su pensamiento, pues por medio de ensayos analiza los aspectos cotidianos de la vida común, como las costumbres, los valores sociales y los discursos de los medios, por medio de los signos que oculta la sociedad en la cultura, la moda y las distintas ideologías.

LA NARRATIVA

Es hasta 1980 que Eco publica su gran obra literaria, El Nombre de la Rosa, novela de género policiaco ambientada en la edad media, en una abadía oculta en los Apeninos (Italia), en donde el fray Guillermo de Baskerville recurre a organizar una reunión con varios religiosos para hablar sobre la herejía de una de las órdenes franciscanas.

En cuanto la novela avanza, van ocurriendo una serie de asesinatos a cada uno de los personajes. Esto provoca que Guillermo, ayudado por su acompañante y discípulo Adso de Melk, inicien una investigación dentro de la enorme biblioteca con la que cuenta la abadía, mientras el exbibliotecario Jorge de Burgos se los impide.

La novela también puede interpretarse como una obra histórica, filosófica y un tratado de semiótica en sí mismo. La novela tuvo tal éxitos, que en 1986 llegó al cine.