Saltillo, Coah.- De Europa llegaron la semana pasada dos noticias, una buena y otra mala, pero la peor llegó de Medio Oriente. La mala fue el atentado en la ciudad de Estocolmo, en Suecia, y la buena, el arresto del exgobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington.

El mundo se conmocionó cuando un camión robado llegó hasta el centro de Estocolmo y atropelló a todos los transeúntes de un paso peatonal, cerca de la Estación Central del Metro, cobrando 5 víctimas mortales y numerosos heridos.

Dos coahuilenses que viven en Suecia experimentaron el caos en el que se convirtió uno de los países con mayor paz y calidad de vida de Europa, luego de que se confirmara como atentado terrorista y se arrestara al autor intelectual.

Pero unos días después, llegó a México otra noticia: la detención en Florencia, Italia, del exgobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington, quien tenía años paseándose por Europa con un nombre falso, utilizando una credencial para votar apócrifa.

El exgobernador enfrenta 11 cargos, entre ellos los delitos de lavado de dinero, asociación delictuosa, vínculos con el crimen organizado, peculado y evasión de la ley, por lo que la justicia norteamericana tramita su extradición, mientras en México sólo solicitan un informe.

Hubo una tercera noticia proveniente del extranjero, los ataques que recibió el pueblo de Siria, víctima de una disputa en la que Estados Unidos y Rusia parecen querer revivir no sólo una guerra fría, sino una verdadera guerra entre oriente y occidente.

El jueves pasado el poder destructivo de Estados Unidos volvió a ser noticia. En esta ocasión, la nación comandada por Donald Trump envió una clara advertencia al mundo –sobre todo a Corea del Norte, Rusia y Siria– de lo que podrían enfrentar si no se alinean a su discurso.

La madre de las bombas no nucleares fue lanzada por EU en Afganistán contra un complejo de túneles utilizados por el autodenominado Estado Islámico. La GBU-43 alberga 9.5 toneladas de explosivos y su poder de destrucción es de hasta 1.6 kilómetros a la redonda. A pesar de lo escandaloso que suena, no se reportaron heridos ni víctimas mortales.