Washington, EU.- Agencias ambientales de Estados Unidos demandaron el martes al fabricante de autos Fiat Chrysler acusándolo de instalar en los vehículos un dispositivo que los hacen parecer menos contaminantes de lo que son.

Se trataría de un software que hacía que los vehículos de 3 litros de cilindrada cumplieran con los requisitos ambientales en el momento en que se sometían a una prueba, pero luego excedían las emisiones contaminantes cuando tomaban la carretera, según un comunicado de la Agencia de Protección Ambiental (EPA), que presentó los cargos en una corte federal de Michigan.

La demanda se formaliza en el mismo mes en que el fabricante alemán Volkswagen (VW) cerró el capítulo principal de su propio problema con autos contaminantes en Estados Unidos y que le costó a la compañía 22 mil millones de dólares en acuerdos e indemnizaciones.

Sin embargo, en este caso los cargos en esta demanda no implican que las autoridades estadounidenses acusen a Fiat Chrysler de haber engañado a sus clientes, como sí sucedió en el caso de Volkswagen.

No se descarta un acuerdo

Fiat Chrysler dijo estar “decepcionada” por la demanda y aseguró que se defenderá enérgicamente, especialmente en lo que se refiere a la acusación de que deliberadamente instaló dispositivos para hacer trampas.

Sin embargo, la EPA dijo que no se descartaba un acuerdo con el fabricante de automóviles y que las negociaciones continuaban.

Explicó que la naturaleza y los términos de este posible acuerdo eran “inciertos”. Hasta el pasado viernes, Fiat Chrysler todavía esperaba evitar el traslado de la disputa al terreno judicial.

La primera denuncia de la EPA fue en enero e involucró a 104 mil autos Ram y Jeeps Grand Cherokee de los años 2014 a 2016.

La cantidad de coches involucrados es mucho menor a la de Volkswagen pero el reclamo es el mismo: los autos contaban con programas que permitían emitir una cantidad de gases contaminantes mayor a la tolerada, lo cual incrementa la polución del aire, según la EPA.

Fiat Chrysler, y en especial FCA US, su filial estadounidense, podrían enfrentar multas de hasta 4 mil 600 millones de dólares.

Además de Estados Unidos, Fiat Chrysler podría tener problemas en Europa, ya que la Comisión Europea acaba de abrir un proceso judicial contra Italia por la violación de reglas en materia de homologación. La Unión Europea reprocha a Roma que no garantiza el cumplimiento de las normas ambientales a sus vehículos.