Monclova, Coah.- El cielo de Monclova no sólo se llenó de color la tarde de ayer, también de una sobresaliente energía de hermandad, aunada a las lágrimas que sin poder evitar se asomaron en el rostro de cientos de madres, padres y hasta extraños, que conmovidos soltaron al cielo miles de globos enviando un mensaje lleno de amor a los hijos que se adelantaron en el camino.

El evento denominado “Suelta de Globos Internacional en Honor a Nuestros Angelitos” se celebró ayer por quinto año consecutivo en las áreas verdes del Parque Xochipilli I.

En punto de las 4:30 horas, más de 700 personas entre padres, hermanos, abuelos y conocidos, se congregaron para participar en este emotivo evento.

Las historias se contaban por cientos, todas diferentes, cada una con un recuerdo y un dolor particular que estremecía el corazón de quienes las escuchaban, pero al final aunque diferentes todas estaban unidas por un mismo dolor, por un mismo sentimiento: el de ver partir a un hijo.

Con sólo observar el escenario las lágrimas de quienes llegaban al evento aparecían irremediablemente.

En una mesa de más de tres metros de largo se colocaron las fotos de los niños, bebés y ultrasonidos incluso de hijos de todos las edades, aunado a esto miles de globos de gran cantidad de tamaños y colores aun atados de las manos de los asistentes convertía el lugar en un espacio de nostalgia y a la vez de fiesta y esperanza por conseguir liberar ese dolor por un momento y hacer una conexión espiritual con sus seres queridos.

Antes de iniciar la suelta de globos, Viridiana González, organizadora de la suelta de globos, el cual emprendió tras el fallecimiento de su niño, dio un mensaje a los padres que han pasado por algo tan doloroso como la pérdida de un hijo.

“Concéntrense en que van a liberar ese dolor que traen adentro, quiero que se den cuenta que lo primero que nos pasa por la mente cuando fallece un hijo es preguntarnos por qué a mi, por qué me pasa esto a mí, pero quiero que volteen a su alrededor y vean que no sólo ustedes pasan por eso, somos muchos desgraciadamente los que hemos pasado por la pérdida de un hijo, volteen a su alrededor, dense cuenta que no están solos, que no son los únicos que pasan por este dolor, ayúdense unos con otros”.

“Es muy difícil perder a un hijo, es un dolor que no tiene medida que vive dentro de nosotros y jamás se va a ir y nos duele escuchar la gente que nos dice: ‘ya déjalo ir, ya déjalo descansar’, pues no, jamás vamos a dejar descansar a un hijo porque ellos están en el cielo y ellos siempre van a vivir en nuestro corazón y en nuestra mente”.

“Son nuestros hijos, son parte de nosotros, y siempre van a vivir aquí, y este evento es con esa finalidad, concéntrense con cada ángel, en enviar ese dolor al cielo, que se vaya, liberen ese dolor por menos una vez al año y darle esa alegría a nuestros ángeles el día de hoy”.

Luego de su mensaje pidió a las más de 700 almas que estaban formadas en círculo acercarse al centro en donde los brillantes colores de los globos y la sensibilización de los presentes convirtió el momento en un espacio mágico bajo la música de fondo con el tema de “Hay ángeles volando en este lugar”.

“Suelten ese dolor que traen adentro, no están solos somos muchos los que pasamos por este dolor, vamos a soltar los globos y liberarnos de ese dolor, mínimo una vez al año y créanmelo tengan fe de que sus ángeles van a leerlo y van a recibir cada globo que se va a enviar”, manifestó Viridiana finalizando su mensaje con la cuenta del uno al tres para por fin elevar los globos con mensajes al cielo.

En ese momento las lágrimas de los presentes se expresaron con mayor intensidad y después de un largo suspiro los globos fueron lanzados al cielo junto a los mensajes de estos padres y madres que con el dolor en sus corazones buscaron un momento de conexión con sus hijos, sus ángeles en el cielo.