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Por Redacción
Publicado el lunes, 24 de abril del 2017 a las 08:04
Saltillo, Coahuila | Reynosa, Tamaulipas.- El testimonio de un saltillense que vivió el “narcoinfierno” en que se convirtió Reynosa tras el abatimiento de un líder del hampa es contundente: “ya iba de regreso a Saltillo, antes de que las cosas se pusieran peor en Reynosa, pero no nos dejaron salir, detenían los autobuses y los carros; lo que ellos querían era provocar el caos y lo consiguieron”.
Y otro testigo más relata a Zócalo vía telefónica lo que experimentó en carne propia: “me tocó ver los carros quemados a media calle y los ponchallantas en los bulevares para que no pudiéramos movernos; en verdad fue un infierno desde la madrugada del sábado, a nadie le deseo que viva estos grados de violencia”.
Reynosa ‘fue un infierno’
Saltillenses quedaron atrapados en el infierno que provocaron grupos criminales en Reynosa, después del abatimiento de dos de sus líderes.
“Me tocó ver los carros quemados a media calle y los poncha llantas en los bulevares para que no pudiéramos movernos”, comentó Diego vía telefónica.
Diego es arquitecto, viajó a Matamoros, Tamaulipas, por motivos laborales y vivió las peores horas de su vida entre el caos y la violencia cuando al pasar por Reynosa no pudo continuar su camino; no fue el único, Antonio intentó salir de la ciudad en un autobús pero fracasó en su intento. pues lo bajaron del transporte, al cual estuvieron a punto de prenderle fuego.
Desde el lugar otro saltillense envió fotografías que tomó desde la casa de un familiar a un helicóptero que realizó ayer rondines sobre la ciudad.
“En verdad fue un infierno desde la madrugada del sábado, a nadie le deseo que viva estos grados de violencia.
“Yo sólo pasaría por Reynosa pero después no pude salir, me enteré por redes sociales de lo que estaba pasando en la ciudad pero no pensé que era tan grave hasta que estuve ahí, fue mucha tensión para mí y para todos los que nos quedamos en la carretera parados, tuve que quedarme a dormir en Reynosa”, comentó Diego.
Desde el sábado, cuando se informó sobre los bloqueos e incendios que había en Reynosa, una de las ciudades más importantes de Tamaulipas, la Secretaría de Gobierno de Coahuila alertó a los coahuilenses para que eviten viajar a ese destino.
La experiencia de Antonio fue más cruda, pues fue bajado del autobús donde viajaba, “ya iba de regreso a Saltillo, antes de que las cosas se pusieran peor en Reynosa, pero no nos dejaron salir, detenían los autobuses y los carros, lo que ellos querían era provocar el caos y lo consiguieron”.
De acuerdo con la información de la Central de Autobuses de Saltillo, los viajes a Reynosa se regularizaron, después de que el sábado se reportara que algunos camiones llegaron tarde por las largas filas que tenían que sortear en la carretera Reynosa-Monterrey.
“Tenemos ahorita las rutas llenas porque como es el fin de las dos semanas que les dan a los niños en las escuelas para que vacacionen, pues todos quieren regresar de última hora a su ciudad de origen”, dijo un vendedor de boletos, que prefirió omitir su opinión respecto a la alerta que existe sobre Reynosa.
Reparación de daños
Empresarios del ramo restaurantero de esta frontera exigieron al Gobierno federal y estatal pagar los daños causados a negocios de venta de comida y tiendas de autoservicio afectados por los disturbios del crimen organizado, luego de que las fuerzas federales abatieron a Juan Manuel Loza Salinas, “El Comandante Toro”.
Alfonso de León Fuentes, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac) en Reynosa, dijo que las autoridades dejaron crecer a los grupos criminales.
“Le exigimos al Gobierno que pague estos daños, ellos provocaron que estos grupos crecieran y ahora se están enfrentando a la sociedad, causándole estos males.
“Ellos los dejaron crecer y ellos tienen que pagar las consecuencias”, señaló.
El sábado, la vocería de Seguridad Pública del Estado reportó nueve comercios, entre estos cuatro tiendas de conveniencia, aunque la Canirac señaló que hoy harán un recuento.
De León indicó que los ciudadanos fueron los más afectados por los disturbios de la delincuencia, que quemó vehículos particulares y de empresas, además de incendiar y saquear negocios.
“El Gobierno, llámese federal, estatal, no pierde, ellos siguen cobrando, aquí la más perjudicada es la sociedad de Reynosa, que está cansada de que no se haga nada y de que esta gente se meta con ella porque no hay autoridad que los pare”, precisó.
Frenar al crimen
El líder de la Canirac mencionó el caso de una taquería que fue incendiada y totalmente destruida por la delincuencia y ahora sus propietarios no saben a quién acudir, ya que dependían de los ingresos que recibían de ese negocio.
“¿Qué va a hacer esa gente? Alguien tiene que responder y ese debe ser el Gobierno”, señaló.
El empresario llamó a las autoridades a detener al crimen organizado que ha hecho daño no sólo a Reynosa sino a todo el estado.
“Esa gente ha hecho mucho daño a Reynosa porque la misma autoridad, el mismo Gobierno los dejó crecer, ahora que ellos los paren”, insistió.
El sábado, integrantes del crimen organizado desataron una serie de disturbios para distraer a las fuerzas federales de un operativo especial de localización “El Comandante Toro”.
El capo fue abatido en una lateral del canal de aguas entre la colonia La Joya y Riveras del Carmen. (Con información de Rosalío González/Reforma)
Toman medidas para mantener la paz
En Coahuila se toman las medidas necesarias para mantener la paz y que no se vea alterada, así como ocurre en otra entidades, en específico en Tamaulipas, donde se han presentado enfrentamientos entre la delincuencia organizada y las autoridades, además de otros actos de vandalismo.
El gobernador Rubén Moreira Valdez, sostuvo una reunión extraordinaria de seguridad en la ciudad de Piedras Negras, para reforzar las estrategias de seguridad en todo el estado y mantener la paz, tranquilidad, el bienestar social y la baja de todos los índices delictivos y no permitir que se presente la violencia.
En la sesión de trabajo estuvieron presentes el secretario de Gobierno, Víctor Zamora; el procurador general de Justicia, Homero Ramos Gloria, PGR, Policía Federal y Segob.
Se reafirmó que la prioridad de la actual Administración es procurar el bienestar de todos los coahuilenses, por lo que se mantiene la lucha contra la delincuencia organizada, así como establecer nuevas estrategias y que la violencia que se está presentado en otras entidades no afecte a Coahuila.
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