El Diario NY | Estados Unidos.- El poder de la naturaleza no perdona nacionalidad, color, raza ni mucho menos condición social. Así quedó demostrado con el devastador pasado del Huracán Irma por el caribe en su devastador paso a tierra estadounidense.

La mansión de 11 habitaciones propiedad del presidente Donald Trump en la isla caribeña de San Martín se informa ha sido destrozadas por el huracán Irma.

La magnitud de los daños a la propiedad de Trump no es totalmente conocido, pero las autoridades francesas dijeron que los cuatro edificios más sólidos en la isla habían “sufrido daños graves”, por lo que medios como el Daily Mail reportan que la mansión de Trump no se salvó de los violentos vientos huracanados categoría 5.

Un portavoz de la organización Trump dijo que las precauciones pertinentes se habían tomado antes de la tormenta sin proporcionar detalles de los daños, de acuerdo con informes de los medios.

El presidente Trump ha estado tratando de vender esta propiedad por los últimos años. La gigantesca mansión compuesta por una finca campestre frente al mar con piscina y gimnasio tiene un precio de $28 millones de dólares, pero al no encontrar comprador Trump ha tenido que bajar el precio recientemente a $16 millones de dólares, según reportes del Washington Post.

Sin embargo tras el paso de Irma la posibilidad de venta de la propiedad, la cual ha sido impactada por el huracán categoría 5, no será tarea fácil para el presidente.

En otro golpe al magnate por culpa de la naturaleza, se teme la suerte que lleve el club de Mar-a-Lago, ubicado en la zona de Palm Beach, Florida la cual recibió orden de evacuar este viernes por la mañana, junto con la barrera de islas y zonas bajas del condado.

La evacuación es parte de un amplio intento de conseguir que la gente no se ponga en peligro por permanecer en sus propiedades ante el inminente y violento impacto de Irma el sábado por la noche.