Saltillo, Coahuila.- Geney Beltrán es ensayista, novelista y traductor, pero además es quien realizó la antología de la escritora Elena Garro para la editorial Cal y Arena el año pasado, en el centenario del nacimiento de la autora de Los Recuerdos del Porvenir.

El deseo porque la literatura de las mujeres mexicanas renazca es lo que lo llevó a editar otra antología, pero esta vez sobre la escritora sinaloense Inés Arredondo, la cual lleva por nombre Estío y Otros Cuentos (Océano, 2017).

SELECCIÓN PERSONAL

Para realizar una antología deben de tenerse factores centrales como la selección de los textos que contendrá y además la obvia reflexión sobre el gusto del lector, así que, ¿bajo qué parámetros eligió Beltrán los cuentos de esta selección? se le pregunta a Beltrán.

“Pues Inés Arredondo fue una escritora muy importante en su tiempo y muy valorada por sus contemporáneos, pero con el paso de los años ha ido olvidándose, entonces sí me interesaba esa necesidad de darla a conocer al público nuevamente.

“El criterio con el que elegí los cuentos es simple, y era la pregunta de: si Inés Arredondo viviera ¿cuáles serían los cuentos que ella hubiera elegido? Y por otro lado, también quería que fuera un punto de enganche del lector con la obra de Inés, que se interesara en ella”, comentó Beltrán en entrevista con Zócalo.

Otro de los parámetros que el escritor incluyó en su antología es que existiera una unión temática en la mayoría de las obras reunidas, y uno de los rasgos principales de los textos de Arredondo es la pasión que mueve a sus personajes.

“Una de las características que aparecen en los cuentos de Arredondo son los espacios reducidos, en el que los personajes pasan por un cambio y esta es la verdadera historia, ya que el cambio en ellos es lo que en realidad se quiere contar; son estas emociones que los personajes contienen la verdadera historia.

“Son las experiencias las que renuevan a los personajes en sus cuentos; las pasiones y los deseos son las motivaciones de los textos de Arredondo y es en ese punto en donde sí encuentro su principal diferencia con los autores de su generación”, dijo.

SELLO GENERACIONAL

La originalidad que volvió a Arredondo una escritora que destacó entre los autores de su generación, fue la de ser más intimista y popular, no cosmopolita o intelectual como la gran mayoría de los autores de la llamada Generación de Medio Siglo.

“Fue un caso muy curioso porque ella fue parte de la llamada Generación de Medio Siglo en donde también estaba García Ponce, Salvador Elizondo y José de la Colina, entre otros. Quienes se pueden considerar escritores para escritores, ya que son muy intelectuales y cosmopolitas. A diferencia de Arredondo, quien fue totalmente popular, además de ser la única mujer.

“Y por otro lado, si algunos de sus compañeros narraban desde fuera de su ciudad, Inés no, ya que ella fue quien supo que se puede ser universal narrando desde la propia casa”, comentó el autor de Cualquier Cadáver y Cartas Ajenas.

CERCANÍA AUTORAL

La cercanía que se debe de tener con un autor para seleccionar de su obra lo más querido o lo más gozoso en cuanto a lectura es una responsabilidad que sólo alguien que ama la lectura de esa obra es capaz de realizar, así que, cuál es la relación personal del antologador con la antologada, se le plantea al narrador.

“Pues en el caso particular de Inés Arredondo mi relación con ella parte de su visión cercana al sentir de los personajes. Cuando yo leí sus cuentos de niño me gustaron mucho, desde entonces creo que es una autora importante que ha ido cayendo en el olvido poco a poco y que es necesario rescatar.

“Y que vale la pena hacerlo porque enseñó y aún tiene mucho que mostrar a la literatura mexicana. Y el que se pueda dar una revalorización es algo que merece la pena intentar. Ese es uno de los principales cometidos de esta antología: el que se recupere su obra ante el público.

A través de los 16 relatos que integran la antología y de su esclarecedor prólogo, Beltrán espera que la obra de una de las más grandes cuentistas que ha tenido México se dé a conocer más allá del mundo de las letras, hasta ser, de nuevo, un referente de la literatura mexicana.