Saltillo, Coahuila.- “El buen vivir y el buen morir” es la reflexión principal que ofrecerá hoy al público El Teatro de la Vida y la Muerte, obra que cuenta con la participación del actor Arsenio Campos, importante histrión de telenovelas como El Maleficio, y Érick Morales, fundador del Museo de la Katrina, en el auditorio de la Secundaria Federico Berrueto Ramón.

ESPEJO DE LA REALIDAD

Para Campos, el teatro es el espejo de la realidad, es un mundo que se crea paralelo al nuestro para mostrar al público la vida que transcurre a los personajes, quienes son personas reales tanto como los actores y los espectadores.

“Esto es un gran espectáculo llamado El Teatro de la Vida y la Muerte, y yo creo que todos estamos dentro de este espectáculo queramos o no, porque el teatro es el mundo. Si vienes a ver la obra eres un espectador, pero también eres parte de la obra.

“Si nosotros estamos hablando al público o les prestamos atención desde encima del escenario, el público pasa a ser lo importante, transformándose así en los actores y nosotros espectadores y claro que también al revés”, comentó el actor.

Así como el teatro es un espejo de la realidad, es también un juego de cajas chinas en donde el público es actor de su propia vida.

“Esto es un ensayo de una obra de teatro que a la vez es la misma obra y la gente que viene a vernos es la misma gente que será actor y público a la vez, precisamente por la idea de que esta obra es una representación más de la vida y la muerte.

“Esta obra de teatro la montamos porque sentimos que hay una gran necesidad de contagiarnos con las cosas que nos pasa a todo el mundo. Mucha gente quiere hacer películas, telenovelas y espectáculos de teatro con temas muy rebuscados; cosa que es innecesaria porque todo está en la vida”, declaró.

La obra es ágil y rápida, a través de tres escenas y seis personajes que con sus aventuras muestran al público un mundo ajeno del cual siempre se pueden aprender cosas.

“Algo que creemos que es muy importante es que la gente lo digiera fácilmente porque es algo muy sencillo y muy dinámico. A través de la hora y media de duración (el público) saldrá encantado porque va a aprender sobre cómo vivir en el día a día”, comentó Morales.

CENTRO CULTURAL

Aunque la obra de teatro es la idea inicial, es sólo una pieza de una obra más grande: la creación de un espacio en donde la sociedad pueda acercarse a las actividades que se irán produciendo en él.

“Con este espectáculo de teatro lo que queremos realmente es arrancar un centro cultural en el auditorio de la secundaria. Para esto contamos con el gran apoyo de las autoridades de la Secretaría de Educación. A partir de la obra, también inicia el centro cultural. Próximamente vendrán espectáculos infantiles, talleres y varias actividades muy dinámicas en donde la sociedad vendrá a disfrutar de la cultura en un espacio que es accesible a todo público”, comentó Campos.

De acuerdo con los actores, son estos lugares de cultura los que ayudan a que la sociedad se acerque más a los problemas de la ciudad, a la vez que crea una comunidad más fuerte en los temas individuales.

“En espacios como estos uno puede presentar lo que tú crees que espera o necesita la gente cercana a la zona. Es ofrecerles cosas interesantes y de interés personal y social. También es darles cosas como experiencias de ellos y de otras personas, que eso precisamente es el teatro: es el arte que tiene que ver con la vida; al teatro se va a conocer las experiencias que le suceden a los actores arriba del escenario”, dijo Morales.

CONTRA LA DELINCUENCIA

Apasionado de las artes escénicas, Arsenio Campos ofrece su punto de vista sobre la salud actual del teatro en el país, el cual cree que ha sido atacado por agentes externos.

“Creo que el teatro está muy detenido por los problemas que hay con la delincuencia, ya que la gente no puede salir a determinadas horas; otro factor es la economía y las influencias políticas con las que nos encontramos y las exigencias que tenemos todos los ciudadanos en donde no tenemos tiempo para ir al teatro”, dijo.

Son estos problemas los que Morales cree que pueden ser vencidos si la comunidad trabaja en conjunto y utiliza al arte como un pilar de apoyo para transformar la sociedad.

“Realmente cuando tú haces cosas con el corazón y haces las cosas bien, las personas pueden pasar a divertirse, a disfrutar y a reír con ellas y sobre todo estar en paz. Entonces si uno tiene una verdadera cultura del amor, la delincuencia se irá apagando poco a poco. El amor es como un balde de agua al fuego de la delincuencia”, finalizó el fundador del Museo de la Katrina.