Saltillo, Coahuila.- El grito de ¡Vivos los queremos! resonó la tarde del miércoles en la Capilla del Santo Cristo y en las calles del Centro de Saltillo, donde decenas de familiares de desaparecidos salieron a manifestarse.

Las familias de la Región Sureste de Coahuila, agrupados en Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en México, y Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila, conmemoraron el Día Internacional de la Desaparición Forzada con una misa y marcha.

“¡No más mentiras de nuestros desaparecidos!”, fue una de las consignas que lanzaron familiares, respaldados por integrantes del Centro Diocesano de Derechos Humanos, Fray Juan de Larios, y estudiantes de Ciencias Sociales.

En una procesión con mantas, fotografías de desaparecidos y globos con la leyenda “Vivos los Queremos”, los familiares se colocaron en el altar de la Capilla de Santo Cristo, donde el sacerdote Pedro Pantoja ofició la misa.

En la homilía, Pedro Pantoja resaltó que las bienaventuranzas de la Iglesia son para personas como ellos, quienes buscan de manera incansable la justicia, en medio de un entorno que se opone a saber de sus familiares.

Los activistas se reunieron frente a Palacio de Gobierno, donde la manta que encabezó rezaba “Desaparecidos, presentes siempre”.

‘Desapariciones, un fracaso del Gobierno’

Para el padre Pedro Pantoja, las desapariciones son un fracaso del Gobierno, pues éstas no sólo no han podido ser resueltas en su mayoría, sino que se siguen incrementando, al grado de que en México existen cerca de 30 mil personas desaparecidas.

En el marco de la celebración del Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, Pantoja ofició una misa junto a los sacerdotes Gerardo Escareño y Fernando Liñán, a la que asistieron cerca de 50 personas de los colectivos Fuundem y Fuundec, integrados por familias de personas desaparecidas.

Ahí, dijo que cerca de mil personas en Coahuila aún son buscadas por sus familiares, y aunque existen avances en ciertos aspectos de este problema, el Gobierno en todos sus órdenes ha fracasado por no poder frenar este delito.

“Es un fracaso porque por eso persisten esas desapariciones, estos crímenes de lesa humanidad (…) este delito está destrozando el tejido social”.

Sin resultados

Lourdes Herrera, activista madre de un niño y esposa de un hombre desaparecido en 2009, coincidió en que existe una buena intención de parte de algunas áreas del Gobierno, sin embargo los resultados no son satisfactorios.

“Creo que ha habido iniciativas del Gobernador aquí en Coahuila que nos han ayudado, pero creo que hay mucha gente que no está capacitada en la búsqueda de personas, hay áreas del Gobierno encargadas de ello que no están haciendo su trabajo de manera adecuada”.

Lucha constante

“Las desapariciones que no sólo han ocurrido en nuestro país desde los 70, sino en otros países de América Latina (…) se recrudecieron en México desde los 90 y en Coahuila después del año 2000”, dijo Lourdes Herrera, quien dio lectura a un pronunciamiento del Centro Diocesano para los Derechos Humanos Fray Juan de Larios.

“Tenemos ocho años de lucha constante, de reuniones con autoridades estatales, federales donde siempre nuestra exigencia principal ha sido, es y será la búsqueda inmediata”.

Dijo que aunque se ha logrado una gran cantidad de leyes, éstas no han sido puestas en práctica para garantizar el respeto de los derechos humanos de los desaparecidos y más importante, que éstos regresen con sus familias.