Por: MOISÉS HERNÁNDEZ M.

Monclova, Coah.- Diez años y cinco meses transcurrieron desde aquel 10 de diciembre del 2006, cuando las Chivas Rayadas del Guadalajara se coronaron campeones del Futbol Mexicano, por onceava vez en su historia derrotando al Toluca en el Estadio Nemesio Diez.

Ayer, tras más de una década de sequía lo volvieron a hacer y fue motivo para que centenares de monclovenses seguidores del Rebaño Sagrado, salieran a festejar la doceava estrella del “campeonísimo”.

Minutos después de que el árbitro central Luis Enrique Santander accionara su silbato, lo que decretaba al Guadalajara como nuevo monarca del balompié nacional, empezaron a salir los aficionados de sus hogares a bordo de sus automóviles portando sus playeras, banderas e inclusive algunos con cabras, trasladándose al cruce del bulevar Pape y Francisco I. Madero, donde festejaron con gran júbilo.

A pesar de que en la última década el Guadalajara fue un equipo en decadencia, que incluso estuvo cerca de perder la máxima categoría al estar en riesgo de descender, la noche de ayer quedó claro que Chivas es un equipo de gran convocatoria en todo el país, ya que una cantidad importante de aficionados monclovenses salieron a festejar el título de Chivas, bloqueando el bulevar Pape a la altura del llamado “Rallador de Queso”, donde entonaron cánticos como “Cielito lindo” y “En dónde están esos Tigres que nos iban a ganar”.

Niños, jóvenes y adultos festejaron la hazaña de un Guadalajara que no era favorito ante Tigres, al menos no como lo eran en aquel lejano 2006 ante Toluca, cuando levantaron el trofeo de campeón con goles de Francisco “El Maza” Rodríguez y Adolfo “El Bofo” Bautista, dándole la vuelta a un juego que perdían tras recibir un gol de Bruno Marioni en el primer tiempo.

Finalmente el estratega argentino Matías Almeida logró el objetivo que se trazó en diciembre del 2015 cuando llegó al banquillo de los rojiblancos, el de levantar a un gigante, lo que tiene de fiesta a más de 40 millones de mexicanos.

La noche de ayer el festejo de los monclovenses fue vigilado por Policías Municipales, quienes desviaron el tráfico por calles aledañas a la avenida principal de la ciudad como lo es el bulevar Pape, por donde los aficionados corrieron agitando sus banderas, mientras otros de desplazaban sonando el claxon de sus vehículos hasta que finalmente se formó un nutrido grupo que durante más de una hora brincó y cantó el campeonato de su equipo.