Ciudad de México.- Informes de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), de la Policía Federal y de la Procuraduría General de la República (PGR) indican que el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) realiza actividades ilícitas en por lo menos 22 estados del país.

Los reportes de las áreas de inteligencia de ambas naciones mencionan que la expansión de la organización criminal tiene tres momentos clave. El primero de ellos fue retomar el control de las operaciones que realizaba Ignacio Coronel Villarreal, Nacho Coronel, integrante del cártel del Pacífico, abatido en julio de 2010. El segundo fue a finales de 2012, a través del surgimiento de las autodefensas en Michoacán. En ese estado, el CJNG conformó grupos de comunitarios para atacar a los Caballeros Templarios, principalmente en los municipios de Aguililla, Coahuyana y Aquila, así como en los que se encuentran en los límites con el estado de Jalisco.

El tercer momento fue separarse del cártel del Pacífico en febrero de 2013, movimiento con el que el grupo, considerado por el gobierno de Estados Unidos y México como el más poderoso, comenzó su expansión en territorio mexicano, en la Unión Americana y en Sudamérica, Europa, África, Asia y Oceanía.

Dominio

La información del gobierno mexicano y estadunidense menciona que el CJNG mantiene el control de Baja California Sur y norte, Colima, Guanajuato, Guerrero, Jalisco, Michoacán y Nayarit. Mientras que en las entidades de Aguascalientes, Chiapas, Chihuahua, Estado de México, Ciudad de México, Nuevo León, Puebla, Querétaro, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sinaloa, Tamaulipas, Veracruz y Yucatán disputa el liderazgo con otras agrupaciones antagónicas, o incluso, mantiene alianzas para el trasiego y la venta de droga.

Reportes de la Policía Federal han identificado que entre las sinergias se encuentra el llamado grupo de Los Combos, conformado en agosto de 2015 para tomar la plaza de Cancún, Quintana Roo.

En Baja California, también tiene alianzas con Los Arellano Félix y en Chihuahua con el grupo de La Línea, brazo armado del cártel de Juárez. En ambos estados se combate al cártel del Pacífico. Según una investigación de la DEA, en 2016 se identificó que el CJNG mantenía contacto con Los Zetas Vieja Escuela para combatir al Cártel del Noreste, comandado por familiares de Miguel Ángel Treviño Morales, El Z-40, quien se encuentra preso. Uno de los puntos que se abordó en las negociaciones fue el ingreso del grupo al municipio de Victoria, considerado como clave para el trasiego de droga a Estados Unidos.

Las alianzas también incluyen a los estados de Guerrero y Michoacán, donde operan la Familia Michoacana y Guerreros Unidos.

Nunca desapareció

Desde el año 2010 el gobierno federal tuvo conocimiento del surgimiento del cártel. La detención de integrantes de la Familia Michoacana y de los remanentes del grupo de Los Valencia o Milenio, dieron los primeros indicios a las autoridades de la organización.

Reportes de la extinta Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal, bajo el mando de Genaro García Luna, así como de la Policía Federal, en ese entonces comandada por Facundo Rosas, detallaban las rupturas en el interior del cártel del Milenio, surgido en Aguililla, Michoacán, a partir de las detenciones de diferentes líderes de la agrupación. Una de ellas, fue la de Óscar Orlando Nava Valencia, El Lobo, en octubre de 2009 y la de su hermano Juan Carlos Nava Valencia, El Tigre, en mayo de 2010.

Las detenciones originaron una escisión en el interior de la organización. Por un lado, el grupo La Resistencia, dirigida por Víctor Manuel Torres García, El Papirrín y Ramiro Pozos González, El Molca, ambos detenidos.

El segundo frente fue el CJNG o Torcidos, bajo el mando de Erick Valencia Salazar El 85, detenido en marzo de 2012; Abigael González Valencia, El Cuini, capturado en marzo de 2015, así como Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, quien actualmente comanda la agrupación.

El CJNG se apoyó en Ignacio Coronel, en ese entonces, hombre de confianza de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, lo que le permitió eliminar a diferentes integrantes de La Resistencia.

Respaldo

La ayuda que recibió el CJNG fue pagada a través del llamado grupo de Los Matazetas, brazo armado del cártel del Pacífico, el cual, el 20 de septiembre de 2011 dejó los cuerpos de 40 personas en dos camionetas en Boca del Río, Veracruz.

Desde el año 2010, cuando el grupo surgió, el gobierno federal ha detenido a más de 300 integrantes, entre ellos, Antonio Oseguera Cervantes y Rubén Oseguera González El Menchito, hermano e hijo de El Mencho, respectivamente. También se encuentran las capturas de Fernando Castillo Rodríguez, El Toro Valencia; Daniel Quintero Riestra, El Dany; Iván Casarín Molina.

Sin embargo, la estructura original del grupo permanece intacta, ya que los líderes y fundadores del grupo no han sido detenidos. Incluso, algunos de los integrantes del cártel de Los Valencia, formaron sus propias organizaciones en Michoacán.

Una investigación realizada por el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) y la PGR, a través del testigo protegido Gino Brunetti, ciudadano de origen colombiano, permitió conocer en 2006 la estructura del cártel de Los Valencia, la cual daría pasó al CJNG. Entre ellos, se encuentran: Alfonso Revueltas, El Poncho; Armando Valencia González, El Tocayo; Cruz Valencia, El Cruzón; y Gerardo Mendoza Chávez, Gerardón; Mario y Ramón Caballero Valencia; Alejandro González Rentería, El Guajillo; Librado Villa Gómez Arreguín; Antonio Torres, El Monillo; Rutilo Naranjo Quintero, y Francisco García Silva, El Fran.

También se encuentran Sofía Valencia Cortés, mamá de Luis Valencia, así como Angelita, Baltasar, Elvia, Albina, Rosa, Amparo, Elías y Ventura. Otras personas son Alicia Sandoval Caballero; Alfonso Arreguín Bravo, El Alazán; Rosalinda González Valencia; Juan José Farías Álvarez El Abuelo, quien fue parte de las autodensas en Tepalcatepec.