Saltillo, Coahuila.- Ante las irregularidades con la que se llevaron a cabo los protocolos para la detención de más de 500 personas, 300 de ellas menores de edad, en el denominado “Safari Fest”, el DIF nacional solicitó un informe detallado de los hechos, por medio de la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia (Pronnif), instancia que de acuerdo con su titular, Yezka Garza Ramírez, tampoco fue notificada.

“Nosotros no intervenimos, incluso no pidieron la intervención de la Procuraduría en su momento (Pronnif), supongo que lo manejaron como faltas administrativas, que es lo que tengo entendido. Acabamos de solicitar esta semana el informe y los partes IPH (Informe Policial Homologado) de Seguridad Pública Municipal, puesto que el DIF nacional está pidiendo también información de cómo pasaron los hechos”, declaró la funcionaria.

Yezka Garza explicó que en la petición mencionada, el DIF nacional indagó sobre posibles violaciones a los protocolos de resguardo y detención de menores, así como abusos policiacos que pudieron haberse presentado, los cuales no fueron dados a conocer a la dependencia que encabeza.

La procuradora informó que todo el caso se manejó por medio de Seguridad Pública Municipal o de la Unidad Especializada de la Policía en Atención de Violencia Familiar (Unepavif), como una falta administrativa, por lo que desconoció la existencia de denuncias por parte de los detenidos, que refieran violaciones a los protocolos o su integridad.