Marca | Ciudad de México.- En las últimas semanas se habla mucho en el fútbol mexicano del ‘Pacto de Caballeros’. Un acuerdo que tiene al balompié azteca entre debate y pláticas de todo tipo.

Sin embargo, existen personas que quizá desconocen el tema y por eso preparamos esta guía. Son cinco puntos sencillos para poder comprender el tema y así, lograr meterse en la conversación sin ningún problema.

¿Qué es?

El ‘Pacto de Caballeros’ es un acuerdo entre todos los dueños de los equipos en la Liga MX. Sin embargo, no hay nada escrito, no es un reglamento, simplemente un convenio de palabra entre todos.

Como no está en ningún papel, no pertenece a las regulaciones de la FIFA, pero nadie ha hecho algo por eliminarlo, hasta ahora.

¿Qué hace?

Su mayor función es proteger los intereses de los dueños en la liga. Les da mayor control en todas las negociaciones, sin importar las condiciones de los futbolistas.

Es decir, el equipo estará involucrado aunque el jugador tenga seis o menos meses de contrato. La franquicia siempre se llevará una tajada de cualquier transacción.

¿Para qué sirve?

Será más fácil poner un ejemplo: Oswaldo Alanís. Chivas no lo dejaba ir, no contaba con él para el Clausura 2018, pero tampoco renovaba su contrato. Por lo tanto, el equipo controlaba su destino.

Por si fuera poco, cualquier club que quisiera ponerse en contacto con el jugador, no podía. Todo era a través de la directiva del Rebaño, quitándole libertad al futbolista.

Y si venden al jugador a otro equipo ¿ya es libre?

No, todavía no. El equipo que formó al futbolista siempre tendrá derechos sobre él. Por lo tanto, en caso de que algunos vayan al fútbol europeo y otro club los quiera regresar, esa franquicia tendrá que preguntar al equipo que lo formó si puede.

En caso de que diga que no, simplemente se cae la negociación. Pero si dice que sí, se puede dar hasta un pago por esta respuesta positiva.

¿Existe en otros lados del mundo?

Sí, hay algo relativamente similar. Escuadras en Sudamérica tienen algo llamado ‘Derechos de Formación’ y aquí, es bueno traer otro ejemplo.

Edinson Cavani salió de Danubio, pasó al Palermo, después al Napoli y posteriormente al PSG. El equipo uruguayo firmó con el italiano este acuerdo que en cada transferencia futura ellos se llevarían un porcentaje.

Sin embargo, cuando un futbolista es libre nadie se mete y se puede ir a dónde guste. De ahí la diferencia con el ‘Pacto de Caballeros’.