Saltillo, Coah.- La historia de Saltillo está oculta por un misticismo que forma parte de una ciudad que, a través de 440 años, ha visto ir y venir a personas de quienes ha tomado lo necesario para sobrevivir.

Santos Rojo es uno de esos personajes y el dramaturgo Armín Gómez Barrios lo convirtió en protagonista de su libro Andanzas y Desventuras del Caballero Santos Rojo (Abismos Editorial, 2017). La publicación, que se presentó ayer en la Casa de la Cultura, consta de tres obras teatrales que hablan de un hecho histórico en el que se mezclan la realidad y la ficción.

“El libro cuenta los primeros años de vida de Saltillo desde el punto de vista de Santos Rojo, quien fue uno de los primeros conquistadores y pobladores, además se le atribuye el haber traído al Santo Cristo a la ciudad.

“Camino Místico a Saltillo es la primera obra y trata sobre la llegada de los soldados españoles y portugueses a la ciudad y cómo se lleva a cabo la fundación de la villa. Santos Rojos está caracterizado como un hombre de fe devota, quien tiene un enfrentamiento con Alberto del Canto debido a sus caracteres opuestos”, comentó Gómez en entrevista con Zócalo.

Las otras dos obras exponen también un repaso histórico-ficcionado de la ciudad, y hablan de las batallas que libró el conquistador para unificar a los antiguos pobladores y la subsecuente historia de la familia Rojo.

“La segunda obra es Barón del Nuevo Mundo, la cual es la visión de los primeros años de la localidad, en la cual se sigue teniendo problemas con los indígenas. Además trata la llegada de los tlaxcaltecas. Santos Rojo es aquí un símbolo espiritual que unificará a los indígenas, tlaxcaltecas y soldados a través del Santo Cristo”, explicó el también académico del Tecnológico de Monterrey.

“Airosas Herederas es la tercera aobra, la cual juega con la historia de las hijas de Rojo, quien les deja una serie de tierras, y comienzan algunas aventuras debido a los cortejos de soldados y comerciantes de la Villa de Saltillo”, agregó.

Con una profunda investigación que apoya a este libro, Armín Gómez se siente libre de utilizar las lagunas grises que encontró en la historia para, a partir de ahí, sembrar la semilla que dará las ramas de sus obras.

“Además de las obras de teatro, mi libro incluye un ensayo en el cual expongo las fuentes que utilicé para crear estos textos. Para hacer estas piezas de teatro leí a distintos historiadores saltillenses como Vito Alessio Robles, Maria Elena Santoscoy y Arturo Villarreal.

“Los leí para hacer algo muy cercano a lo histórico con fuentes de primera mano, pero utilicé esos huecos de los que no tenemos mucha información, para imaginar lo que pudo haber pasado. Sí es todo con fuentes y también parte de mi imaginación”, dijo.

SUPERVIVENCIA Y MEMORIA

Preservar la memoria de la ciudad es uno de los objetivos que el doctor en la materia de letras planea lograr con estas obras, pues según él, las ciudades en las que nacimos o vivimos son los lugares que nos dan identidad y pertenencia.

“Es muy importante mantener la memoria y recordar a los primeros pobladores, sobre todo en el contexto de la globalización actual; a través del internet todos estamos comunicados, tenemos los mismos referentes e imágenes, pero lo que nos da un sentido de pertenencia es la historia que, en este caso, es la de la ciudad”, mencionó el también periodista.

¿Cuál es esa identidad que tiene la ciudad de Saltillo y que se intenta preservar? se le preguntó a Gómez, quien respondió con una idea que ha marcado el discurso del arte literario del noreste del país por escritores y críticos.

“La búsqueda de la supervivencia, el tesón de la batalla contra la naturaleza, porque finalmente Saltillo tiene un clima muy contrastante, a veces hace mucho frío y otras mucho calor, el agua es un recurso preciado en el ambiente semidesértico saltillense. Creo que estos elementos son los que marcaron a los primeros saltillenses, a quienes puedo imaginar diciendo ‘vamos a sacar adelante esta ciudad’.

“Es el pragmatismo el que dio paso a la perseverancia para llevar a cabo estas metas para sobrevivir. Siento que otra cosa que nos sigue definiendo es el de la religiosidad y el misticismo de las supersticiones de magia que han seguido vigentes, es un poco de lo que nos sigue definiendo”, declaró el escritor.