Ciudad de México.- La Secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Rosa Icela Rodríguez, recibió hoy al empresario rumano Florian Tudor, acusado por autoridades estadounidenses y la FGR de encabezar una mafia que clona tarjetas bancarias.

“ El encuentro privado se realizó en las instalaciones de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana en Avenida Constituyentes, donde la servidora pública atendió la solicitud del ciudadano de origen rumano, de ser escuchado por las autoridades del gobierno de la República”, anotó la dependencia en una tarjeta informativa.

“ En la reunión se le dio fecha de la garantía de audiencia ante la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaria de Hacienda y Crédito Público”, añadió.

El 26 de febrero, el Presidente Andrés Manuel López Obrador, ordenó a la funcionaria recibir a Florian Tudor.

“ Y de este asunto en especial le voy a pedir a Rosa Icela Rodríguez que atienda a esta persona”.

“ No se ha tratado mucho en el Gabinete de seguridad, ya se trató, pero lo importante es que se avance más”, aseguró.

A mediados de febrero, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) denunció ante la Fiscalía General de la República (FGR) a la red de empresarios y políticos presuntamente relacionados con la mafia de clonación de tarjetas que encabeza Florian Tudor.

Asimismo, el organismo de la Secretaría de Hacienda rechazó que haya difundido la lista de personas y empresas con cuentas bloqueadas por sus vínculos con este grupo delictivo que opera en Quintana Roo.

La UIF informó el 4 de febrero pasado del bloqueo de cuentas a 79 personas físicas y morales, relacionadas con la mafia rumana, varios de ellos empresarios y ex funcionarios de Gobierno.

Tudor ha acusado al titular de la UIF, Santiago Nieto, de extralimitarse en sus funciones al difundir la relación de empresarios y políticos a quienes les fueron congeladas sus cuentas por sus nexos con la mafia rumana.

Acusó al Gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, de “avalar el cochinero” en su contra. Lo retó a él y a Alberto Capella, ex Secretario de Seguridad Pública, a declararle la “guerra de frente”.