Ciudad de México.- A 27 años del sismo de 1985, que sacudió la Ciudad de México, por primera vez en la historia del país se llevará a cabo un macro simulacro de sismo a nivel nacional.

“El escenario que vamos a implementar tiene que ver con un sismo de 8.1 en la escala de Richter, éste estaría en el supuesto ocurriendo a las 10 de la mañana del mismo 19 de septiembre”, explicó Laura Gurza, coordinadora de Protección Civil del gobierno federal.

En el ejercicio participarán  21 entidades, que activarán los protocolos del plan sismo con el objetivo de evitar la improvisación y fortalecer la coordinación y la comunicación entre las dependencias y las entidades en caso de una emergencia real, siendo los estados afectados por el sismo: Guerrero, DF, Oaxaca, Morelos, Michoacán, Puebla y Estado de México.

“Dado que el ejercicio durará tres horas en lo general, este tiempo nos alcanza para activar y probar los protocolos iniciales de búsqueda y rescate”, señaló Gurza Jaidar.

En conferencia de prensa en las instalaciones de la Secretaría de Gobernación (Segob), se anunció que las Secretarías de la Defensa Nacional (Sedena), de Marina (Semar) y Seguridad Pública federal (SSP) activarán el plan Anáhuac, en caso de sismo en la Ciudad de México.

“En el Campo Militar número uno estaremos integrando los centros coordinadores de operaciones del área centro, del área norte, del área oriente y del área poniente; el área sur quedará a responsabilidad de la Secretaría de Marina. Como una acción inicial ante ese tipo de eventualidades, realizaremos la evaluación inicial de daños”, explicó el teniente coronel Jaime López Alanís, enlace de protección civil de la Sedena.

Igualmente en dicho campo militar se instalará la fuerza de apoyo para casos de desastre, que en este caso incluye tres mil 720 efectivos listos para actuar en cualquier parte de la ciudad en atención de la población que resulte afectada.

Tres agrupamientos de ingenieros para casos de desastre, cada uno equipado con nueve unidades de maquinaria pesada, ocho tractocamiones y camas bajas respectivas, con 136 elementos para operarlos. Dos cocinas comunitarias, que podrían repartir hasta nueve mil raciones diarias, así como agrupamiento de servicios, integrados por células de sanidad, de transmisiones, equipos de búsqueda y de rescate en estructuras colapsadas; personal de policía militar con binomios canófilos para la búsqueda y rescate de personas atrapadas, y un componente aéreo, de dos aeronaves de la Fuerza Aérea Mexicana.

Mientras que en Acapulco se llevará  cabo un plan de evacuación en caso de tsunami, al mismo tiempo que se activara la alerta para este tipo de fenómenos.

“Se activan los sistemas dentro de la República de las áreas afectadas, donde se va a dar a conocer los tiempos posibles de llegada de la ola y las alturas. De acuerdo con el desarrollo de la metodología las alturas van hasta seis metros dentro de la afectación en las costas de Guerrero”, señaló el capitán de Fragata  Carlos Guerra, de operaciones de contingencia de la Semar.

Para ello se dispuso de 500 elementos de la Semar, 15 vehículos, un helicóptero para efectuar las acciones de evaluación de daños, y en Guerrero se contará con la participación de la Octava Región Naval, que movilizará cinco unidades de superficie, dos de la clase oceánica para simular sismo, afectación por tsunami y la evacuación de las unidades.

Las acciones serán coordinadas desde el Centro de Mando de la SSP federal, que contará con alrededor de tres mil efectivos, así como dos helicópteros Black Hawk con personal capacitado.

No será activada la alerta de sismo.