Ciudad del Vaticano.- La embajada mexicana en El Vaticano adelantó la celebración por el 202 aniversario de la Independencia de México y realizó hoy su tradicional recepción anual y la ceremonia de “El Grito” bajo techo debido a la lluvia.

A los festejos, que se llevaron a cabo en la residencia del embajador Héctor Federico Ling Altamirano, en el céntrico parque de Villa Borghese, asistieron representantes del Vaticano, diplomáticos, políticos, sacerdotes, religiosas y mexicanos en general.

Antes de dar “El Grito”, portando la bandera de México, Ling señaló que su deseo para el “querido, esforzado y abnegado” pueblo mexicano es que tenga más solidaridad.

“La mayoría piensa que el valor máximo de la persona es la libertad, otros que la justicia y yo creo que la manifestación perfecta de la justicia es la solidaridad”, dijo.

“Esa es la cualidad que yo hubiese pedido para México, que después de 202 años sigue luchando por ser plenamente independiente, plenamente libre, plenamente autónomo y plenamente justo”, añadió.

“Todos somos responsables de todos. Que cada alma mexicana individualmente se haga responsable del destino de nuestra patria, que pienso que éste y no otro fue el ideal de quienes arrancaron la lucha por la independencia en México y Latinoamérica en aquellos tiempos”, apuntó.

Tras su discurso y la ceremonia de “El Grito”, los presentes pasaron a la degustación de una abundante cena basada en antojitos mexicanos, que incluyó tostadas, picaditas, tamales, tequila y cerveza.