Entrelíneas | Sinaloa.- Personal médico amputó una pierna a Valentina, la niña de seis años de edad que recibió un balazo de la Policía Federal en un retén de la carretera Culiacán-Mazatlán en el kilómetro 122.

Ricardo Salazar, el hermano de la señora que atropelló de muerte a un policía federal en el kilómetro 122, mencionó hay indignación en la familia, por lo que demandarán a la Policía Federal.

El doctor Alberto Páez Salazar informó que no había forma de salvarle la pierna, mientras que el director médico del Hospital Pediátrico de Sinaloa informó que fue una amputación parcial de la pierna, por arriba de la rodilla.

“No había posibilidades debido que había una insuficiencia vascular severa con áreas ya de higiene muy importantes de falta de oxígeno”, señaló, sin embargo su vida ya no corre peligro.

El médico desconoce cuántas balas traía en la pierna debido que la niña llegó al Hospital Pediátrico intervenida.

EL CASO

Ayer, un agente de la Policía Federal, de Proximidad Social división Caminos, perdió la vida al ser atropellado por un automóvil que no respetó un retén ubicado en el kilómetro 122 de la Autopista de Pacífico Mazatlán-Culiacán.

Los hechos se registraron a las 12:00 horas, en las inmediaciones del poblado Laguna de Canachi, a unos metros de un puente ubicado por la carretera de cuota.

Autoridades policiacas informaron que los agentes tenían un retén debajo de un puente en el carril de norte a sur, donde tenían retenido otro vehículo al que le realizaban una revisión de rutina, en eso en agente trató de cruzar la carretera y fue atropellado por un automóvil que iba a exceso de velocidad.

La unidad que atropelló al agente es un automóvil marca Nissan de la línea Versa, de color blanco con placas de Sinaloa, en el que viajaban dos mujeres y una niña.

Al ver el incidente con su compañero y que el conductor del carro no detuvo la marcha, los agentes federales comenzaron a disparar contra los neumáticos del carro logrando hacer blanco en una de las llantas, por lo que la conductora perdió el control del volante y se salió de la cinta asfáltica para caer a un canal.

¿QUÉ PASÓ?

El hermano de la conductora explicó que cuando su hermana vio los conos de un retén quiso frenar, pero no pudo.

Entrevistado minutos después de que su hermana rindió declaración al Ministerio Público federal en una cama de Urgencias del ISSSTE en Culiacán, el señor cuestionó la actitud de los policías.

Por un lado, dijo, están los policías, pero por el otro, su familia; donde su hermana está herida, así como su sobrina Yésica, de 26 años, con disparos en el pecho, cabeza, brazos y abdomen, mientras que la niña Valeria perdió este día una pierna.

Los agentes al darse cuenta de que la conductora no se detenía, empezaron a disparar de frente, y después por atrás, añadió.

“Mi hermana cuando miró los conos trató de frenar, no le respondieron los frenos, los federales estaban en frente a ella, como a 50 metros, algo así, cuando no se movieron, se quedaron en la carretera y empezaron a disparar.”

Cuando le hacen la parada, su hermana al darse cuenta que le fallaban los frenos, con una mano les hacía señas que no podía pararse, manifestó.

“Ella les decía que no, que no se podía parar y le dispararon”, reiteró el hermano.

Su sobrina Yésica comenzó a gritar cuando se dio cuenta de que les iban a disparar y su hermana soltó el volante, perdiendo el control.

“Nunca le tiraron a los neumáticos, le tiraron a ellas, a los neumáticos ojalá le hubieran tirado, le tiraron a dar a ellas, tiraron a matar”, enfatizó.

“Los policías no están para disparar, están para resguardar”, acusó. Criticó un retén en una carretera de alta velocidad. Ellos, prosiguió, cuentan con autos de persecución, de respuesta inmediata.

“¿Por qué disparan?, es una familia, iban dos niñas, de 6 y 8 años, mi hermana y su hija”.

Los agentes cuando se dieron cuenta que el auto no se paraba, en igual de hacerse a un lado, empezaron a disparar.

“Ella al momento que gritó su hija Yésica que les estaban apuntando, mi hermana soltó el volante para cubrirse de los impactos, pero no todos fueron afortunados, mi sobrina Yésica recibió varios impactos, Valeria, también le volaron una pierna de un balazo y la agarraron de frente, o sea, sí se dieron cuenta que el auto no podía detenerse, que no iba a frenar, porque se le pusieron enfrente y no se quitaron y soltó el volante, los hechos ya están ahí”.

Su hermana había visitado La Brecha, Guasave y se dirigía, de Guasave a Mazatlán.

Fuente: Sin Embargo