Ciudad de México.- A dos años de la desaparición de los estudiantes de la normal rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, el vocero de los padres de familia, Felipe de la Cruz, aseguró que hasta el momento sólo se ha encontrado el cuerpo de un alumno, contradiciendo las investigaciones que se tienen hasta el momento por parte del gobierno federal.

En entrevista dentro de la Facultad de Contaduría y Administración de la Universidad Autónoma de Guerrero (Uagro), desmintió que se hayan encontrado los restos de tres estudiantes, a pesar de los resultados finales que muestran las investigaciones realizadas en el basurero de Cocula.

“Hasta el momento no hay ningún avance; el gobierno estatal intenta ocultar la verdad histórica, protegiendo a las personas que cometieron este hecho”.

“Un claro ejemplo, es el video que demuestra cómo fueron alteradas las investigaciones en el río San Juan, y pese a esto el presidente de la república nombró a Tomas Zerón Lucio como secretario técnico de Seguridad Nacional cuando deberían de castigar por ocultar las evidencias”.

El vocero, dijo que es totalmente falso que se hayan encontrado tres cuerpos de los normalistas; los únicos restos que están verdaderamente identificados son los de Alexander Mora Venancio, así como lo demostraron los forenses argentinos, en tanto los de Joshivani Guerrero de la Cruz, aún no pueden ser comprobados.

“Para nosotros el único cuerpo que ha sido encontrado de los 43 es el de Alexander y de los demás no sabemos de su existencia, es por eso que aún pedimos la presentación con vida de los 42 normalistas, porque hasta el momento las autoridades no han podido demostrar la verdad de que estén vivos los 42 normalistas que faltan”, explicó Felipe de la Cruz.

Mencionó que se encuentran a la espera del mecanismo de seguimiento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para saber qué pasó y quién es el autor intelectual de este hecho.

El 26 de julio, los padres estuvieron en una comisión en Estados Unidos para llevar a cabo un convenio entre el gobierno federal, los familiares de los normalistas y la CIDH.