Sabinas, Coah.- Abundantemente bendecido don Isaías Castillo arribó a sus ochenta y ocho años de vida, motivo por el cual su orgullosa familia, especialmente sus hijos, ofrecieron emotivo festejo en su honor, en el que sus seres queridos lo colmaron de detalles haciendo de su aniversario el día perfecto.

Las sorpresas estuvieron a la orden del día, pero lo mejor para el cumpleañero es sentir el inmenso amor que hay entre su familia y que se lo hacen notar cada día con atenciones, cuidados y esmero, para compensar toda su entrega como excelente esposo, padre y abuelo.

La amena convivencia concluyó dejando en todos los asistentes un excelente sabor de boca y el deseo de que Dios les permita festejarlo muchos años más.