Internacional
Por Agencias
Publicado el jueves, 26 de enero del 2017 a las 23:17
Washington.- Este miércoles, Donald Trump aceptó las renuncias de todos los directores del Departamento de Estado sin haber nombrado a sus reemplazos.
Tradicionalmente, los funcionarios de alto nivel presentan su carta de renuncia ante la nueva administración, pero generalmente el presidente no las acepta hasta que los sustitutos para el puesto hayan sido nombrados y confirmados por el Congreso.
Los directivos que abandonaron su cargo fueron Patrick Kennedy, subsecretario de Estado; Joyce Anne Barr, secretaria asistente de Administración de Estado; Michele Bond, secretaria asistente para Asuntos Consulares y el embajador Gentry O. Smith, director de la Oficina de Misiones en el Extranjero.
Todos estos funcionarios habían servido tanto a gobiernos republicanos, como demócratas.
Sus renuncias, combinadas con los recientes retiros en el Departamento, dejarán a la dependencia virtualmente sin personal calificado en la burocracia interna y las oficinas en el extranjero, señaló NY mag.
Los directivos también funcionarían como contrapeso para las decisiones del secretario de Estado nombrado por Trump, Rex Tillerson, quien no tiene experiencia en un cargo público. El nombramiento del empresario fue criticado por sus vínculos estrechos con Moscú y la petrolera Exxon Mobil, de la que fue director.
“Si el secretario de Estado tuviera problemas navegando la burocracia federal o resistiendo el impulso de poner los intereses de los inversionistas de Exxon por encima del pueblo estadounidense, los directivos civiles prevendrían que se saliera del camino”, escribió la revista.
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