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El Tema de la Semana: No existen los accidentes

Por Ruta Libre

Publicado el lunes, 5 de junio del 2017 a las 16:03


El pequeño Eduardo Pedraza, de 11 años, murió por una serie de factores de riesgo que nadie se aprestó a vigilar

Saltillo, Coah.- Un niño de 11 años y su familia llegaron a Saltillo para disfrutar un fin de semana. Se hospedaron en un hotel recientemente inaugurado, en una de las zonas más exclusivas de la ciudad. Toda iba bien. El evento deportivo al que venían había finalizado y estaban a punto de regresar a Monterrey.

A veces las desgracias aparecen en el lugar que menos se piensa o de las cosas que aparentan ser inocuas, pero que al final de cuentas no lo son, porque un descuido –y no sabemos bien aún de quién, pero de lo que sí es que algún culpable habrá– provocó la muerte del niño, quien falleció a causa de un paro cardiaco tras una descarga eléctrica.

¿Cómo iba a pensar el pequeño Eduardo Pedraza que utilizar una de las atracciones del desarrollo inmobiliario Parque Centro le costaría la vida? Porque si algo se sabe es que el niño utilizó el sube y baja –que es al mismo tiempo una lámpara– sin que nadie le advirtiera del riesgo, sin que nadie estuviera al pendiente de que un simple juego para niños conectado a la corriente eléctrica, y que sumándole el factor de la humedad, podría convertirse exponencialmente en un arma mortal. Y eso fue lo que pasó.

Lo que enseña su partida es que los accidentes no existen, porque la condiciones estuvieron dadas para desatar la tragedia, pero en México, como diría el escritor Juan Villoro, a veces las autoridades deciden declarar suicidios asistidos para no investigar y proteger intereses, que procurar y ejercer justicia, como es la debida labor del Estado.

A tres días de la trágica muerte de Eduardito, la Procuraduría General de Justicia del Estado apenas comenzaba los peritajes para concluir si había perdido la vida a raíz de una descarga eléctrica, si en el lugar había instalaciones eléctricas al descubierto y si, en efecto, se trató de un caso de negligencia. La semana pasada lo único que se sabía es que un niño había muerto y que nadie se hizo responsable.

El complejo inmobiliario a cargo de Grupo Davisa aún está en desarrollo. Hay edificios en construcción en Parque Centro, y eso ya lo convierte en lugar de riesgo.

Ojalá que no se repita una tragedia como la que mató a Eduardito, ojalá que se haga justicia.

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