El Mundo / Beatriz Juez | Washington.- En los mítines de Donald Trump se ven estos días más carteles que rezan “Mujeres por Donald Trump”. Su número parece haberse multiplicado tras la polémica suscitada por un vídeo de 2005 en el que Trump alardeaba de besar y meter mano en sus partes más íntimas a las mujeres sin su consentimiento y de poder seducir a cualquier mujer por el simple hecho de ser una estrella.

Muchas mujeres republicanas siguen apoyando al magnate a pesar de todo. La economista y estratega republicana MariCruz MaGowan es una de ellas. Es hispana. Es mujer. Es republicana. Y el próximo 8 de noviembre votará por Donald Trump. “Yo no voto ni como mujer ni como hispana. Yo voto como americana. Yo veo lo que es lo más importante y lo mejor para mi país. Yo, desde ese punto de vista, voto”, explica por teléfono MaGowan.

Tras la polémica suscitada por sus declaraciones hace 11 años, Trump ha quitado hierro al asunto y ha dicho que se trataba de “conversaciones de vestuario” entre hombres. “Me siento automáticamente atraído por las guapas y empiezo a besarlas. Es como un imán. Las beso. Ni siquiera espero. Y cuando eres una estrella te dejan hacerlo. Puedes hacer cualquier cosa. Lo que quieras”, explicaba Trump.

El vídeo ha agitado la campaña electoral y ha provocado una crisis dentro del partido republicano. Muchos líderes republicanos le han retirado su apoyo y otros han pedido que renuncie a la candidatura.

¿Pero qué han hecho las 28 senadoras y congresistas republicanas? Muchas han condenado sus palabras sin retirarle el aval al candidato, otras le han pedido que abandone y algunas todavía no se han pronunciado al respecto.

“Me disgustan sus comentarios, pero creemos en lo mismo”

La senadora Deb Fischer, por ejemplo, le retiró su apoyo cuando se publicó el polémico vídeo, pero ha dado marcha atrás y dice que le votará en noviembre. “Me disgustaron sus comentarios. Como mujer y como republicana, me molestó mucho oírle hacer esas declaraciones. Pero sé que cree en las mismas políticas que yo creo con respecto a las regulaciones y a la reforma fiscal y eso es lo que necesitamos”, dijo la senadora Fischer. Trump “ha decidido que no se va a echar a un lado y respeto su decisión”, añadió la senadora por Nebraska.

Muchos en las redes sociales criticaron estos cambios de postura en tan pocos días. “Señora Fischer, usted es una senadora apoyando la misoginia. Poniendo a nuestras hijas en peligro. ¿Se ha desvanecido su joven valentía?”, preguntó la cantante Lady Gaga a la senadora republicana a través de Twitter.

Durante el segundo debate presidencial, Trump reiteró que siente “un gran respeto por las mujeres” y negó que hubiera abusado sexualmente de ninguna de ellas.

El candidato atacó al ex presidente Bill Clinton, esposo de la candidata demócrata Hillary Clinton, de quien dijo que “nunca ha habido nadie en la historia de la política que haya abusado más de las mujeres”. Y aseguró que Hillary Clinton destrozó a las mujeres que denunciaron los abusos de su marido.

Mujeres que le acusan de agresiones sexuales

La negativa de Trump de haber abusado sexualmente en el pasado de mujeres ha enfurecido a algunas de sus presuntas víctimas. Siete mujeres han denunciado que fueron víctimas de abusos y tocamientos del multimillonario, aunque ninguna lo denunció ante las autoridades cuando ocurrieron los hechos.

Dos de las mujeres hablaron con el diario The New York Times. Jessica Leeds asegura que hace tres décadas Trump le tocó el pecho en un avión e intentó meterle mano debajo de la falda. “Era como un pulpo”, aseguró Leeds. Rachel Crooks, que trabajaba como recepcionista en la Trump Tower, explicó que Trump la besó en la boca sin su consentimiento cuando se lo encontró a la salida de un ascensor. El diario The Palm Beach Post ha entrevistado a Mindy MacGillivray, una mujer que asegura que Trump le tocó el culo en 2003 en su complejo en Mar-a-Lago en Florida.

Por otro lado, la periodista de la revista People, Natascha Stoynoff. dice que Trump le besó en la boca sin su consentimiento, cuando fue a entrevistarle a él y su mujer Melania en Mar-a-Lago coincidiendo con su primer aniversario de boda. “Me volví, y en cuestión de segundos, me empujó contra la pared y me metió la lengua a la fuerza hasta mi garganta”, explicó la periodista. “Tú sabes que vamos a tener una aventura, ¿verdad?”, asegura Stoynoff que le dijo Trump antes de que llegara Melania. Después del incidente, la periodista pidió no tener que cubrir más informaciones sobre Trump.

Trump ha negado las acusaciones, “completamente falsas”, y ha asegurado tener “pruebas” para desmentirlas. “Estos ataques están orquestados por los Clinton y sus aliados”

Dice que el “incidente” que describe la periodista de la revista People “nunca ocurrió” y que el artículo de The New York Times está “totalmente inventado”. Los abogados de Trump han enviado una carta al diario pidiéndole que retire inmediatamente el artículo y pida disculpas al candidato. El periódico ha contestado que no lo retirará.

MaGowan considera “hipócrita” que Hillary Clinton denuncie las palabras de Trump cuando ella ha permanecido al lado de su marido durante todos estos años a pesar de los escándalos y acusaciones de abusos sexuales contra el ex presidente.

Esta hispana anima a los republicanos a votar por Donald Trump en noviembre. “Es nuestra única opción”, asegura MaGowan.

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