México, DF.- Marilyn Monroe sostuvo a principios de los 60 un fugaz romance con el mexicano José Bolaños, asegura el escritor y periodista español Xavier Navaza, en el libro “El Último Amante de Marilyn”.

“Hubo mucho vino, mucho champán, muchas copas y, seguramente, bastante cocaína”, dice el autor, en exclusiva.

La diva andaba de compras

Navaza sostiene que el idilio entre Bolaños, entonces de 26 años, y ella, de 35, fue un simple “ligue” de la estrella de Hollywood.

“Fueron 10 o 14 días de romance, con una carga erótica y sensual muy fuerte, tras conocerse el 22 de febrero de 1962 en una tienda en México, donde la actriz iba a comprar muebles coloniales, ya que ese tipo de decoración estaba de moda en las mansiones de Hollywood”, señala.

El escritor, cuyo libro circula en España con el sello Alvarellos Editora, documentó su relato gracias a entrevistas con allegados a la actriz, como el cineasta Carlos Velo, el político Luis Soto y el empresario Inocencio Ferrer, entre 1976 y 1983.

“Velo me contó que en esos días Marilyn salía todas las noches a divertirse en México y bebía muchísimo. Velo decía: ‘pobre Marilyn Monroe, tenía el mundo a sus pies y estaba todos los días peneque (borracha)’, y, de hecho, muere meses después, porque estaba hundida, y es en esa fase de abismo donde se desarrolla aquella estancia en México y su romance con Bolaños”, indica Navaza.

Agrega que Velo llevó a Bolaños y Marilyn al rodaje de “El Ángel Exterminador”, de Luis Buñuel, que se desarrollaba aquellos días.

Compañía mal vista

Más tarde, cuando ambos llegan a Hollywood entre arrumacos y gestos cariñosos, a principios de marzo de 1962, para que ella recibiera un Globo de Oro, uno de los comentarios en los diarios de EU era que qué hacía Marilyn con aquel guionista a quien achacaban militancia en la izquierda mexicana, comunista y prosoviética, justo en un año en el que se produce la crisis de los misiles, entre Cuba, EU y URSS.

Navaza sostiene que Velo le confirmó que Bolaños estaba, en efecto, vinculado a grupos izquierdistas mexicanos.

“La mayoría eran españoles que procedían del Partido Comunista de España, y todos eran prosoviéticos, así que las sospechas del FBI, que estuvo en México investigando los vínculos de Bolaños, eran ciertas al hablar del acompañante de Marilyn”.

El escritor lamenta que nunca pudiera hablar con Bolaños, fallecido en 1994, sobre su relación con Marilyn, quien murió cuatro meses después del affaire.

Playboy discreto

“Bolaños fue un playboy y bon vivant que siempre quiso ser un gran cineasta, aunque no lo consiguió. Sin embargo, jamás habló de su relación con Marilyn, aunque le llamaron en varias ocasiones de EU para que lo hiciera, pero siempre mantuvo silencio, incluso cuando se mencionó que, de las últimas llamadas que hizo Marilyn la noche de su muerte, entre ellas había una a Pepe Bolaños”, concluye Navaza.