Ciudad de México.- En 2014, más del 80 por ciento de los mexicanos se dijeron altamente preocupados por su seguridad electrónica, financiera, personal y, en general, de la seguridad nacional, lo que los coloca en el primer sitio mundial en la materia, revela un informe de la empresa internacional Unisys especializada en tecnologías de la información.

El documento, que evalúa esos cuatro índices de seguridad, registró un aumento en los grados de preocupación de los mexicanos de 10 por ciento en promedio para cada una de las categorías, lo que además ha generado un clima de alta desconfianza de los ciudadanos con el gobierno, plantea el estudio.

Las preocupaciones de los mexicanos en el terreno de la seguridad nacional es por las problemáticas que se viven en todo el país; de seguridad financiera, por el temor de no poder cumplir con sus obligaciones financieras y por la posibilidad de ser víctimas de robo de identidad; la seguridad en la Internet la relacionan con el riesgo de realizar compras en línea y, finalmente, en cuanto a su seguridad personal se muestran preocupados por el mal uso de su información y por ser víctimas de la delincuencia en el corto plazo.

La posición de México en el informe global está ubicada en el primer sitio de los cuatro rubros de los ciudadanos con la mayor preocupación del país. En el rubro de seguridad nacional, la Nación se sitúa en segundo lugar de los ciudadanos más preocupados, por arriba de Colombia y tan sólo por debajo de Malasia.

“Lo que resulta grave es que en América los niveles del índice de seguridad sobrepasan los 150 puntos, en comparación con los Países Bajos donde el índice no rebasa los 66 puntos”, expone Unisys. México pasó de 173 puntos a 203 de 2013 a 2014, “un nivel de preocupación serio”.

Desde 2012, el índice de los mexicanos que se decían preocupados por el tema de la seguridad nacional comenzó a registrar un incremento. En 2013, 73 por ciento, para 2014 aumentó a 82 por ciento a 2014. Los que se dijeron no preocupados son el 3 por ciento de la muestra.

La situación también se ve reflejada en la inseguridad personal: 86 por ciento están seriamente preocupados por la posibilidad de sufrir un robo. El índice aumentó 10 por ciento de un año a otro, lo que coloca al robo de bienes como la amenaza número uno en México, junto con el robo de identidad por el que 88 por ciento están seriamente preocupados. En los próximos seis meses, 86 por ciento están seriamente preocupados por el robo de identidad y 82 por ciento están seriamente preocupados por la seguridad nacional.

En general, el índice de inseguridad aumentó en promedio 17 puntos.

EL TEMOR A LA INSEGURIDAD CIBERNÉTICA

Unisys plantea que los índices de preocupación de los mexicanos respecto a su seguridad informática y financiera comienzan a repuntar, ya que también se ubica en los primeros lugares del sondeo a nivel global, las principales amenazas son el fraude de tarjetas bancarias y los virus de la Internet.

De acuerdo con la evaluación, muchas de las problemáticas se han generado y/o reforzado en los últimos años, por lo que en ocasiones el gobierno puede no haber desarrollado sus capacidades para resolverlas.

Desde 2012, tres cuartas partes de los mexicanos tienen temor de que otras personas puedan obtener información de sus tarjetas de crédito, “las empresas deben trabajar más en la protección de los datos del cliente, ante los niveles de preocupación que muestran […] las amenazas de seguridad han crecido de manera exponencial en tamaño, alcance y sofisticación”, se puede leer en el informe.

Unisys agrega que las medidas de seguridad tradicional exhiben la ineficacia frente a los ataques persistentes a las redes corporativas a través de Internet y recomienda a las empresas a informarse de las leyes del marco integral de seguridad cibernética para proteger los datos y las redes de la empresa, de amenazas internas y externas; conocer el volumen de los datos y ubicar los que resulten sensibles y establecer la protección que necesitan, por lo que deben contar con dispositivos de última generación.

De la gente que fue entrevistada, 7 por ciento ha sufrido de clonación de tarjetas bancarias, 6 por ciento ha sido víctima de robo de identidad y 4 por ciento de fraude al realizar compras en línea, la mitad desconfían de esta práctica, por lo que de 2013 a 2014, la noción de desconfianza aumentó 26 por ciento.