Castaños, Coah.- Nada ha resuelto el delegado regional de la Procuraduría General de Justicia en la Región Centro, Rodrigo Cháirez, en cuanto a la denuncia por el supuesto robo de que fueron objeto hace más de cuatro meses, cuando elementos de la dependencia reventaron la vivienda que habitaba una de las hijas de Marcelo Carrillo, de la cual sustrajeron efectivo producto de la venta de la Unión de Productores que él dirige, al confundirla con una casa donde se vendía droga.

“Ya no espero nada bueno la verdad, de llegar a recuperar algo, creo que no, se han vuelto puras mentiras nada más, puros calmantes pero no hay una respuesta en concreto que hable con la verdad absoluta”, enunció en tono molesto.

Dijo que ya no espera nada porque ya pasó un tiempo considerable, lo que es favorable para la dependencia policial darle largas al asunto sin que haya una respuesta por otorgar que pueda convencer.

“Hemos estado en pláticas con el comandante en turno de apellido Villa, no hemos llegado a ningún acuerdo, ellos argumentan que no fue su gente, hasta el momento no hemos tenido alguna respuesta favorable, en pocas palabras no tengo esperanzas”, externó.

Destacó que no hay nada en concreto para cumplir incluso las instrucciones del propio gobernador Rubén Moreira, que giró la carta que le entregamos cuando inauguró el puente, siendo canalizado a la misma dependencia.

“En caso de que no se recupere lo de la familia ni lo de la Unión tengo que responder, porque hay que dar cuentas claras a los compañeros, de una u otra manera hay que recuperar los ocho mil 500 pesos que se perdieron”, explicó.

Externó que ha acudido a cada una de las citas que le han hecho de parte de los elementos de la PGJE regional, sin que ofrezcan nada en claro, de ahí la necesidad de que se habla con la verdad y se ponga un alto para que ya no se actúe al libre albedrío, del cual no hay una responsiva para nadie cuando la Policía comete los errores.