Múzquiz, Coah.- Familiares del señor Juan Gabriel Lumbreras Ramírez, de 43 años, quien se suicidó el 21 de julio en una vivienda del barrio El Bajío, exigen a las autoridades de la Procuraduría de Justicia que investiguen bien la muerte de este hombre, pues piensan que pudo haber sido asesinado y “montado” la escena de un suicidio.

La señora Florencia Ramírez Morales, madre del señor Juan Gabriel, explicó que al llegar a la casa de su hijo en la calle Moras número 803 del barrio El Bajío en donde él aparentemente se quitó la vida, encontraron muchas inconsistencias que hacen sospechar que se montó una escena de suicidio.

“Primero encontramos el supuesto mecate con el que se ahorcó mi hijo y estaba sujetado solo con un clavo de una pulgada. No es posible que ese clavo haya soportado el peso completo de mi hijo, ya que era un hombre alto y pesado”, aseguró la señora Florencia.

Otro de los indicios que encontró la familia fue que en el celular de la víctima tenía mensajes intimidatorios de números desconocidos, por lo que sospechan que pudieron haberle causado algún mal a Juan Gabriel.

“Hace como cinco años mi hijo atropelló a un niño aquí en la ciudad y se estuvo haciendo cargo de los gastos médicos del menor. Sin embargo, los tíos y otros familiares del niño amenazaron con matar a mi hijo Juan Gabriel si lo volvían a ver. Creemos que podría tratarse de una venganza o algo parecido”, indicó la madre de Juan Gabriel.

La autoridad determinó que la muerte de Juan Gabriel se trató de un suicidio, ya que según el reporte preliminar no encontraron huellas de violencia en el cuerpo.

A pesar de ello, la familia de Juan Gabriel exige que se abra una carpeta de investigación en torno a los hechos.