Saltillo, Coahuila.- A cuatro años de la pavimentación de la calle Obregón con concreto asfáltico, ya presenta una docena de hundimientos de medianos a severos, sin contar que al menos ocho alcantarillas se encuentran hasta 15 centímetros por debajo del nivel de calle.

La obra de 8 millones de pesos sufre las consecuencias de la nula atención o mantenimiento por la actual administración, por lo que, pese a su reciente entrega, padece los efectos de las calles que llevan décadas sin ser atendidas.

En las bocacalles de Corona y Pérez Treviño se observa un daño adicional, pues entre los recientes trabajos de repavimentación no se preocuparon de hacer las reparaciones específicas en las secciones de Obregón, ya que la calle es de concreto y no de asfalto.

No sólo los trabajos mal hechos y lentos están afectando la vialidad a la que recientemente se le invirtieron 8 millones de pesos en 2013, sino que también se están hundiendo los registros de drenajes.

Los trabajos de renovación de carpeta de rodamiento se realizaron durante el último año de la pasada administración municipal, comprendieron de Presidente Cárdenas hasta la calle San
Lorenzo.