Monterrey, NL.- Lo que comenzó como un juego terminó en tragedia para un niño de 7 años de edad que se mantiene internado desde el pasado 26 de diciembre en el Hospital Universitario con quemaduras de tercer grado en el 15% de su cuerpo.

El pequeño Luis Fernando Zavala Martínez, presenta quemaduras en su abdómen y pecho causadas por otro niño, vecino suyo, que le roció acetona en su playera y luego le prendió fuego con un cerillo.

“Que sucedieron los hechos en la casa del menor que lo quemó, de cinco años, este, le echó acetona en el cuerpo, en toda su camisita, y luego le prendió un cerillo”, comenta la madre del menor.

Sin embargo el calvario también lo han vivido sus padres quienes por más que buscan, no encuentran los medios necesarios para brindarle la atención médica adecuada, pues aunque cuentan con seguro popular se enteraron que simplemente ese tipo de servicio médico no lo brindan.

“Y ahorita, pues está sin empleo (su marido), y no podemos cubrir lo del Seguro, lo del Hospital, entonces nos dice el Seguro Popular que no lo puede cubrir porque son quemaduras de tercer grado, nada más cubren primero y segundo grado, nos dijo la trabajadora social”, denuncia la madre de Luis Fernando.

Y es que el tratamiento que debe recibir diariamente es costoso y será largo.

“Los parches son caros, son seis parches por cada curación, cada parche cuesta ciento y feria, entonces, pues yo he conseguido de allá y de acá, y a veces algunos vecinos me han ayudado, pero no podemos cubrir todo”, confiesa la señora Martínez.

Incluso han acudido a instituciones privadas, pero el apoyo ha sido insuficiente.

“Acudí a Caritas, me ayudaron nada más con doce parches, pero me dijeron que ya no me podían ayudar con más cosas”, nos comparte la madre del menor.

Ahora la mamá de Luis Fernando solo pide a las autoridades apoyo económico e incluso psicológico para que su hijo puede regresar a ser el mismo que era antes del trágico accidente.