Por Redacción
Publicado el sábado, 15 de abril del 2017 a las 08:02
Monclova, Coah.- Fieles católicos recordaron el calvario que sufrió el hijo de Dios antes de morir por amor a la humanidad y rescatarlos del pecado, durante la representación del Viacrucis viviente realizado la mañana de ayer.
El Viacrucis o Camino a la Cruz es una de las más antiguas devociones practicadas por los Católicos en todo el mundo y consiste en acompañar a Jesús en su pasión y muerte, repasando las 14 estaciones, por lo que año con año, en la parroquia Santiago Apóstol se realiza una representación de este para que los fieles puedan morir y renacer con Cristo.
Por ello, cientos de fieles católicos que se reunieron en la Iglesia Santiago Apóstol, donde oraron y ofrecieron este viacrucis para pedir a Dios por las familias, ya que en últimas fechas existen familias muy desunidas, los matrimonios se terminan fácilmente y los hijos no sienten respeto ni amor hacia sus padres
En cada una de las 14 estaciones del viacrucis se realizó una oración especial para pedir por los padres, por las madres de familia o los hijos, quienes son los que más preocupan en los últimos días ya que incluso algunos atentan contra su vida al sentirse solos.
Primera estación: Jesús es sentenciado a muerte y no por un tribunal, sino por los mismos que le habían aclamado poco antes.
Segunda estación: Jesús cargando con la cruz, que asemeja a los padres y madres de familia quienes diariamente salen a trabajar para sacar adelante a sus hijos y muchas ocasiones son jornadas laborales muy largas y mal pagadas.
Tercera estación: Jesús cae por primera vez bajo el peso de la cruz, con ello muestra a las personas que la vida es difícil pero tienen qué salir adelante.
Cuarta estación: Encuentro con la Virgen, donde se da a conocer que siempre habrá alguien que los apoye, sobre todo las madres que son quienes más aman a sus hijos.
Quinta estación: El Cirineo ayuda señor a llevar la cruz, con ello se muestra que es necesario ayudar a los demás con sus cargas.
Sexta estación: La Verónica limpia el resto de Jesús, son las personas que no se alejan a pesar del qué dirán.
Séptima estación: Segunda caída en el camino a la Cruz; nos señala que las familias deben de ser fuertes aún cuando tengan caídas.
Octava estación: Jesús consuela a las mujeres.
Novena estación: Jesús cae por tercera vez: con esto muestra que a pesar de las dificultades, siempre se puede seguir adelante.
Décima estación: Jesús es despojado de sus vestiduras; en ocasiones se pierde algo muy querido en nuestras vidas, pero por amor a Dios tenemos qué aceptarlo.
Décima primera estación: Jesús clavado en la Cruz; es el momento en que nos damos cuenta que a veces es necesario hacer un sacrificio por los demás.
Décima segunda estación: Muerte de Jesús, con ello muestra la batalla que comenzó el hijo de Dios para el perdón de los pecados de todos los seres humanos.
Décima tercera estación: Jesús en brazos de su madre; Las madres siempre están ahí para apoyarnos y es necesario que las respetemos y les demos un lugar especial en nuestra vida y corazón.
Décima cuarta estación: El cadáver de Jesús puesto en el sepulcro; con ello muestra que cuando todo pareciera estar terminado, siempre existe la posibilidad de iniciar todo de nuevo.
Finalmente, el sacerdote Eduardo Neri, pidió a los presentes que recuerden las reflexiones que se hicieron y que mueran con Jesús y resuciten con él, pues así podrán empezar a tener más herramientas para fortalecer a su familia.
Acompañan a María en su dolor
Para mostrar sus condolencias a la madre de Dios, la noche de ayer, cientos de fieles católicos se reunieron para dar el pésame a María y realizar la procesión del silencio, con lo cual, aceptan a Jesús en su corazón y se disponen a cambiar.
Previo a la procesión del silencio, fieles católicos estuvieron presentes en la misa y la alabanza a la cruz, que es el signo del arrepentimiento por los pecados cometidos y todo el mal que han realizado, por lo que estuvieron reflexionando sobre la vida de Jesús, el dolor que sufrió al salvar a los hombres del mal y también se les pidió que reflexionaran sobre su vida.
Posteriormente, decenas de personas participaron en la representación de la procesión del silencio que se realizó la noche de ayer, donde caminaron sobre el primer cuadro de la ciudad portando la imagen de María y el ataúd donde se encontraba Jesús y finalmente acudieron a la iglesia donde se oró por su alma.
Con este acto las personas aceptan también a Dios en su corazón y reconocen que es capaz de sanar todo aquello que les ha hecho daño y que no les permite ser buenos cristianos.
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