Ciudad de México.- En México se estima que alrededor de dos millones de mujeres y 198 mil hombres prestan sus servicios para el aseo de las casas, el cuidado de los niños y la preparación de los alimentos.

Son los trabajadores del hogar, cuya labor de acuerdo con las autoridades es mal pagada y sus derechos no son respetados debido a que en su mayoría se trata de personas en condiciones de desventaja social, con poco acceso a la educación y a las oportunidades de desarrollo.

Este domingo el Instituto de las Mujeres de la Ciudad de México (Inmujeres) llevó a cabo la “Feria Interactiva por los derechos de las Trabajadoras del Hogar” con el objetivo de difundir, sensibilizar y reflexionar sobre el valor del trabajo doméstico.

Hay compañeras que vienen de provincia, compañeras indígenas que a veces no hablan español y les dicen te doy casa y comida y algo más y con eso estas pagada y no podemos hablar de salarios a veces”, aseguró Carmen Salinas, coordinadora del sistema de unidades de Inmujeres.

En el evento que se realizó en la Puerta de los Leones del Bosque de Chapultepec, se brindó asesoría jurídica y psicológica, además de actividades lúdicas e informativas.

Actualmente el Sindicato Nacional de Trabajadores y Trabajadoras del Hogar (SINACTRAHO), lucha por reivindicar los derechos de las personas que trabajan de manera remunerada en el hogar, pero el camino no ha sido fácil.

De acuerdo con el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) las trabajadoras del hogar se enfrentan a la estigmatización, al maltrato y a la desvalorización, lo que origina condiciones laborales precarias y carentes de un marco regulatorio.

La democracia empieza en casa, si no valoramos la importancia de todos los que colaboran no vamos a avanzar como sociedad, porque por afuera sí decimos que vivan los derechos, pero por adentro nos cuesta respetar los derechos de estas trabajadoras”, agregó.

El Inmujeres señala que 9 de cada 10 personas que trabajan en el hogar no cuentan con contrato laboral, tienen una paga baja, en su mayoría menos de dos salarios mínimos diarios, y sin prestaciones, de ahí que llamen a la población a tomar conciencia sobre las condiciones económicas, sociales y laborales a las que se enfrenta este sector de la población.