Saltillo, Coah.- El Atlético Saltillo Soccer deberá de jugar un partido perfecto sí es que aspira a mantenerse con vida en la fiesta grande de la Liga Premier Serie B, teniendo enfrente a unos Coyotes de Tlaxcala que tratarán de hacer pesar al Estadio Tlahuicole para instalarse en las semifinales.

Tras ocho años de espera la Liguilla de la Segunda División Mexicana regresó a la capital coahuilense con un resultado adverso, luego de un error de Jesús Siller que permitió la anotación de Javier Radabán, para que los caninos tlaxcaltecas salieran con la mínima ventaja del Estadio Olímpico.

Los “atléticos” están obligados a ganar por dos para avanzar a las semifinales, ya que los Coyotes de Tlaxcala tienen como, en primera instancia, ventaja el gol de visitante, y la segunda, su mejor posición en la tabla, debido al superliderato de la Serie B.

La marea naranja y blanco no tuvo los mejores dividendos fuera del Olímpico, ya que como visitantes obtuvieron par de triunfos y cuatro derrotas, sin embargo, la hazaña que los puso en esta Fiesta Grande la consumaron en patio ajeno, tras la victoria 2-0 sobre los Constructores de Gómez Palacio, por lo que saben lo que es ganar en territorio hostil y ante momentos de alta presión.

Por su parte, los caninos tlaxcaltecas lucieron impenetrables en casa al ganar cinco partidos en el Tlahuicole con 22 goles a favor y únicamente uno en contra, ese gol les propinó su única caída como locales ante el Yalmacán, lo que deja en claro que no hay fortaleza que no se pueda conquistar.

En el duelo de estrategas, la balanza está inclinada a favor de Silvio Rudman de los tlaxcaltecas, quien no conoce la derrota en liguilla como timonel de los Coyotes con marca de ocho triunfos y cinco empates, mientras que Lorenzo López disputará su cuarto duelo de fiesta grande en Segunda División, con marca de dos victorias y un descalabro.

El reto es mayúsculo para el Atlético Saltillo Soccer, pero para poder ser campeón hay que afrontar desafíos de este tamaño. Saltan al Tlahuicole en calidad de víctimas, pero con la mentalidad clara de que no hay rival enorme al que no se pueda derrotar.