Eugenia Flores Soria | Saltillo, Coah.- La voz de Plácido Domingo, además de cruzar fronteras entre el tiempo y espacio, llegó a instalarse en el amor de un público internacional. El español, de talento versátil y carisma único, logró acercar la ópera y la buena música a todos sus escuchas y retocó las canciones populares con la habilidad digna de los grandes maestros. Hoy, el tenor cumple 70 años y el mundo lo celebra en agradecimiento al legado artístico y humanitario que forjó durante décadas.

Zócalo habló con cantantes y conocedores de la música en nuestra localidad. Los entrevistados explican cómo el intérprete ha significado un modelo a seguir en sus carreras musicales.

Un músico carismático

Alejandro Reyes-Valdés, pianista y coach vocal, comentó que Domingo ha sido constante en su trabajo y posee un gran carisma, virtud que lo ayudó a destacar: “Él es muy importante para todos los músicos dedicados a la ópera… Plácido Domingo ha sido uno de los pocos tenores que en vida se convierten en referencia. Quiero decir que si comparamos a Domingo con su eterno compañero Pavarotti, en facultados vocales, Pavarotti tenía más en particular para cantar las notas agudas”.

“Pero Plácido Domingo ha llegado hasta donde está por la tenacidad y su inteligencia. No solamente es cantante, yo lo he visto tocar el piano, es buen pianista. Es el ejemplo vivo de que la tenacidad y la inteligencia pueden llevar al límite de las cosas y aparte el señor tiene muchísimo carisma, ha sabido moverse correctamente en el mundo operístico que es bastante difícil”, concluyó el conductor del programa “Ópera sin Anestesia”.

El ‘artista completo’

El tenor Armando Martínez admira a Plácido Domingo porque es un “artista completo”: “Es un gran músico. Ha trabajado también como director de orquestas importantes a nivel internacional como la de Berlín y la de Nueva York”.

El intérprete resaltó que Domingo es una gran influencia para los cantantes de ópera: “Muchos no hemos tenido la oportunidad de convivir con él, pero las interpretaciones que nos deja sí han tenido influencia tanto en nuestra visión del arte como nuestra perspectiva, en el caso de los tenores, de cómo interpretar piezas y arias de la ópera”, señaló. El cantante admira al tenor porque tiene una “voz extraordinaria” y además también es actor: “Ha sido un gran artista por su manera de resolver los personajes y en su calidad como ser humano ha impulsado a muchos talentos, sobre todo en Latinoamérica”, especificó.

Un gran ejemplo

El joven tenor Carlos Aveldaño piensa que Domingo es uno de los “grandes” artistas de ópera del mundo. “En mi carrera ha influido para pensar que no hay quedarse nada más en el canto, también hay que tocar algún instrumento, conocer ampliamente la música, en este caso no sólo la ópera. Te hace prepararte más. Es un ejemplo a seguir el maestro”, confesó el Aveldaño.

“Cualquier cantante quisiera hacer la carrera que Plácido Domingo tiene. Es un gran ejemplo para los cantantes que estamos y para los que vienen. Es una gran figura a seguir”, finalizó.

Pálcido Domingo nació en Madrid el 21 de enero de 1941.

Estudió piano y dirección de orquesta en el Conservatorio Nacional de Música en la Ciudad de México.

En 1959 debutó con el papel de Pascual en la ópera “Marina”.

Participó en la Ópera de Tel Aviv, representación que extendió su fama.

Participó en el Metropolitan Opera de Nueva York con la ópera “Adriana Lecouvreur”.

En 1991 ganó el Record Guinness cuando el público le aplaudió durante 80 minutos ininterrumpidamente y salió más de 100 veces a saludar a la gente.

Ganador del Premio Príncipe de Asturias de las Artes 1991.