En días pasados comenzaron las precampañas presidenciales en México, como parte del proceso electoral constitucional de 2018 en el que se elegirá no sólo Presidente de la República, sino también diputados federales y senadores. En el caso de Coahuila, renovaremos además los 38 ayuntamientos.
El país vive ya desde ahora la efervescencia política de un proceso de tal envergadura como es la elección del jefe de la nación. Son tiempos en que la sociedad ha avanzado en democracia y en participación cívica, en actitud más crítica y en mayores demandas a partidos, gobiernos y servidores públicos.
Es sana una transformación de la ciudadanía y ese reclamo lo vemos adoptado en las fuerzas políticas, en los candidatos, en los gobiernos e instituciones. En fin, es una dinámica que a todos nos beneficia y nos obliga a ser mejores en cada una de las trincheras en que se encuentre.
El Partido Revolucionario Institucional está consciente de los cambios en México y ha hecho lo conducente: mantenerse a la altura de la expectativa ciudadana, implementar al interior medidas modernas y hasta audaces para dar respuesta eficaz a los requerimientos de un país que se mueve.
José Antonio Meade Kuribreña es el precandidato del PRI. Ha sido un servidor público con una trayectoria intachable; fue secretario de Energía, secretario de Hacienda, secretario de Desarrollo Social y secretario de Relaciones Exteriores en los dos últimos sexenios.
Tiene 48 años. Casado y padre de tres hijos. Es licenciado en Economía por el ITAM, licenciado en Derecho por la UNAM y doctor en Economía por la Universidad de Yale. Por su excelencia y trayectoria en el servicio público, es bien visto por todos los sectores de la sociedad, incluso por personajes de partidos de oposición. Es un servidor eficiente y de resultados.
Nuestra nación requiere consolidar los alcances logrados con las reformas constitucionales y convertirse en una potencia mundial; fortalecer la justicia social, que se traduzca en un México con mayor desarrollo e igualdad, vanguardista, más justo y con mejores oportunidades para todos.
Pepe Meade es un hombre honorable, visionario, comprometido, sensible y honesto, de pensamiento maduro y pragmático, pero sobre todo sabe cómo mantener la estabilidad del país y lo hará crecer en beneficio de los mexicanos.
El PRI tendrá en Meade a un gran candidato, pero sin duda alguna México tendrá en él al Presidente que necesita para los retos futuros.
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