Ciudad de México.- Hoy 7 de diciembre se cumplen 15 años del juicio que marcó el mundo de la música y las incipientes plataformas digitales.

Fue en aquel entonces que un chico de 19 años, Shawn Fanning, puso en jaque a la Recording Industry Association of America o RIAA (Asociación de la Industria Musical estadunidense) y a la banda de heavy metal Metallica, cuando el muchacho creó Napster, un lugar en la red donde los adolescentes y el público en general podía bajar canciones.

La idea de Fanning era simple: crear un servicio virtual, en este caso Napster, que permitiera compartir archivos musicales de manera gratuita, entre los que estuvieran registrados dentro de esa comunidad.

Y funcionó extraordinariamente, porque los usuarios creaban sus propios álbumes con los temas que realmente querían, grabándolos en los también recientes CD, lo que hacía que esta incipiente plataforma un sitio popular y de mucha demanda.

Sin embargo, la situación se salió de control cuando las autoridades se percataron que por este medio no se les pagaba nada a las disqueras, distribuidoras y a los propios autores, lo que significó un problema mucho mayor, pues de alguna forma se violaba el copyright o derecho de autor.

La gota que derramó el vaso fue cuando la banda metalera Metallica se percató que su tema I Disappear estaba circulando a través de Napster; lo extraordinario de esta situación es que esta canción era apenas un demo, aún no se comercializaba y mucho menos se distribuía, pero la realidad es que ya estaba en las estaciones de radio, porque alguien la había filtrado en este sitio y ya era del dominio público.

Por supuesto esto fue la punta de lanza de un enorme conflicto que estalló en los primeros días de diciembre de 1999, cuando el creador de Napster fue llamado a juicio enfrentándose a los metaleros y a la propia RIAA.

Metallica argumentó que este sitio violó tres puntos fundamentales: No respetó el derecho de autor, usó ilegalmente de una interfase para audio digital y además fomentaba que los usuarios cayeran en la violación de derecho de autor al grabar la música sin pagar nada a cambio.

Cabe mencionar que durante este juicio Napster obtuvo más adeptos de los que registró antes de este evento.

“Nuestro asunto nunca ha sido con el concepto de compartir la música, todos saben que nunca nos hemos opuesto a que nuestros fans escuchen y compartan sus grabaciones hechas en los conciertos. El problema que teníamos con Napster es que ellos nunca nos preguntaron a nosotros ni a ningún otro artista si queríamos participar de su negocio. Es bueno que estén yendo hacía una dirección legal”, declaró en aquella época, a diversos medios, Lars Ulrich, baterista de Metallica.

Napster fue declarado culpable y tuvo que pagar a los creadores y dueños de la música derechos de autor por cerca de 26 millones de dólares por el uso sin autorización de estos materiales y 10 millones más en avance por futuras regalías.

La empresa tuvo que declararse en quiebra, sin embargo, un par de años después fue comprada por la marca alemana de multimedia Bertelsmann por 85 millones de dólares.

Es un hecho que el creador de esta plataforma, pese a todos los problemas legales que tuvo, alcanzó uno de los grandes sueños: ser millonario a los 30 años.

Además se dio el gusto de ser invitado a una entrega de los premios MTV, donde presentó una categoría en vivo usando una camiseta negra que con letras blancas desafiaba a toda la industria musical: decía Metallica.

Siguió desarrollando videojuegos para otros sitios que sí aceptaron sus ideas como medida de expansión.

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