Elección abierta

Para finales de noviembre o en el arranque de diciembre saldrá la convocatoria para elegir candidato a Gobernador por el PRI en Coahuila. La semana arrancó intensa, con el anuncio de Rodrigo Fuentes, dirigente del PRI en el estado, desde Torreón, respecto a que el próximo abanderado surgirá de un proceso abierto a militantes y simpatizantes, pero como no será requisito presentar la correspondiente acreditación, cualquier coahuilense con credencial de elector en mano podrá votar.

Los enterados aseguran que la decisión fue acertada y el anuncio, oportuno, pues quien resulte ganador de la interna, irá legitimado a la constitucional.

 

Desde Enrique Martínez

El esquema del cual los priistas de Coahuila echarán mano para elegir candidato a la Gubernatura no es nuevo. El actual Gobernador, Miguel Ángel Riquelme, fue abanderado producto de una elección interna contra el dirigente cetemista Jesús Berino Granados, quien después fue diputado local.

En 2005, Humberto Moreira Valdés ganó la contienda interna frente a Javier Guerrero García, ahora funcionario del IMSS en el Gobierno de la 4T; el exsecretario general adjunto del PRI nacional, Alejandro Gutiérrez y el exdiputado local y Alcalde de Torreón, Heriberto Ramos Salas.

Un sexenio atrás, en 1999, los priistas también fueron a una interna y en la boleta aparecieron Enrique Martínez y Martínez, quien ganó, y el ahora fallecido, Jesús María Ramón.

 

A priistas y no priistas

En esta ocasión, en el estado más priista de nuevo se abre la elección frente a 2023. La idea, nos comentan, es que nadie diga que no tuvo oportunidad de competir, y por capacidad y trabajo ahora lo deberán demostrar. ¿Quién dijo: yo? Hasta ahora solo pintan dos: Manolo Jiménez y Jericó Abramo.

Finalmente se despejó la incógnita. El PRI abrirá el proceso y ahora, como dicen en los ranchos, lo único que no se vale es llorar.

El que no tardó en salir a redes a decir que la decisión del PRI es precisamente lo que solicitó, fue Abramo Masso.

También dijo que estará atento para ver las condiciones de la consulta abierta. Abierta es a la militancia y a la sociedad. ¿A poco no quedó claro?, se preguntan en el PRI.

 

No es novedad

Sobre que PRI y PRD irán juntos a la contienda del próximo año en Coahuila, no es novedad. El año pasado fueron aliados en la elección de los 38 ayuntamientos y si no les fue mal, como para qué cambiar la estrategia.

Hace dos semanas anduvo por la Laguna Jesús Zambrano, para más señas dirigente nacional del PRD, y dio por hecho que la alianza con el tricolor se mantiene para el proceso de cambio en la gubernatura. También habrá elección de diputados locales, pero si se ponen o no de acuerdo, será otra historia.

Novedad sería que los priístas amarren o de plano descarten la alianza con Acción Nacional, pero por lo visto eso se podrá saber hasta después de la elección interna, que de acuerdo con los tiempos de la legislación electoral, será entrando el año.

Por ahora se sabe que en el PRI miden costo y beneficio con la eventual alianza con el PAN.

 

Otra vez, atole

En la región Centro del estado alguien convenció a algunos ipecos y se acercaron a la 4T, confiados en que ello abriría las puertas de Palacio Nacional a la petición que desde hace tiempo plantean: la declaratoria como zona de emergencia económica para Monclova, Frontera y sus alrededores, en buena medida por las condiciones de la siderúrgica Altos Hornos de México.

El caso es que de la 4T les mandaron este lunes a la secretaria de Economía, la expanista Tatiana Clouthier, y en lugar de respuestas claras, otra vez les tocó atole.

La respuesta de la enviada presidencial fue: lo revisaremos; es decir, eso y nada es lo mismo.

La misma gestión la hicieron hace tiempo los senadores Verónica Martínez, del PRI, y el morenista Armando Guadiana, en el único punto de acuerdo en que coincidieron, y la respuesta del Gobierno federal fue idéntica: lo revisamos. Total, los sorprendidos empresarios no dan una.

 

Entre morenistas

Y de la región Centro hablando, hubo reunión para anunciar el programa Jóvenes por la paz, antes Jóvenes construyendo el futuro. Hubo varios oradores, Ricardo Mejía, por supuesto; Tatiana Clouthier, el gobernador Riquelme Solís y la secretaria de Seguridad, Rosa Isela Rodríguez.

De lo que más llamó la atención, cuando el Gobernador les explicó, casi casi con pizarrón en mano, por qué la estrategia de constructores de la paz funciona en otros estados, pero no en Coahuila: acá sí hay empleo, oportunidades de estudio y ninguno de los 38 municipios se encuentra entre los 50 más violentos del país, idea original del programa,

De acuerdo con los datos que mostró MARS, la estrategia tampoco encaja porque ni siquiera Coahuila lidera en el número de homicidios, ni de violencia juvenil, y, para no variar, en breve hará el anuncio de una empresa para Frontera, en donde fue el evento. En resumen, nos reportan que el Gobernador salió bien librado de la reunión, entre puro morenista.

 

No los invitaron

Cuando los servidores de la nación, es decir, la porra oficial, gritaban bien aleccionados, “Ricardo, Ricardo”, en un intento por destacar la presencia de Mejía Berdeja, quien seguido deja tirada la chamba de subsecretario de Seguridad Pública, para venir a hacer campaña, los jóvenes convocados se preguntaron: ¿quién es ese tal Ricardo?

Por cierto, nada más para que se den una idea de cómo andan las cosas al interior de Morena y del gobierno federal, ni se asomó por los eventos el expanista Reyes Flores, quien se supone es el representante de Andrés Manuel López Obrador en Coahuila. Simplemente, no lo invitaron, y lo mismo ocurrió con otros personajes, como Luis Fernando Salazar y Lenin Pérez. Por lo visto, no están en los planes. Solo hubo lugar para Mejía Berdeja y Armando Guadiana. A estas alturas, el senador a todas va.