México, DF.- Como si hubiera dado sólo un chasquido, Víctor Manuel Vucetich ya devolvió a la Selección Nacional lo que perdió en las últimas prácticas con su antecesor: sonrisas y ambiente festivo.

Lejos de aparentar ser un equipo al borde de la eliminación para el Mundial, antes de dar la imagen de un grupo tenso, el Tricolor convirtió al Centro de Alto Rendimiento en un campo de risas y buen humor al estar por fin la plantilla completa que encarará este viernes el duelo ante Panamá.

Ya con los elementos provenientes de Europa, el entrenador nacional tuvo a sus 26 convocados para armar la receta que deberá encontrar el sabor de la clasificación en los próximos dos partidos del Hexagonal, paladear tal vez lo agridulce de ir a un repechaje o aguantar lo amargo de la eliminación.

Los jugadores demostraron no estar tensos ante esa gama de opciones. Durante la sesión que tuvieron en el CAR mostraron camaradería, bromas, carcajadas, relajación.

Sobre todo en el tenis-balón para la parte inicial del entrenamiento, donde las risas fueron el común denominador. Giovani dos Santos, Javier Hernández y Javier Aquino, los de reciente incorporación al grupo, de inmediato conectaron con el ambiente alejado de la presión.

El portero Guillermo Ochoa se perdió la segunda parte del entrenamiento por trabajo de recuperación en el gimnasio.

El delantero Oribe Peralta estuvo en el tenis-balón y ya al efectuarse futbol se apartó de la práctica, ya que jugó el domingo con su club, Santos Laguna, además de tener un golpe en la pierna derecha, sin ser de consideración.

Justino Compeán, presidente de la FMF, observó la primera mitad de la sesión.