Saltillo|Monclova|Piedras Negras|Acuña|Carbonífera|TorreónEdición Impresa
Amazon toma ventaja para llevarse los derechos de transmisión de las Chivas Chicharito vuelve a causar baja en la convocatoria de Chivas PRI condena asesinato de Noé Ramos: ‘¡no permitiremos que la violencia decida!’ México elige abanderados para los Juegos Olímpicos de París 2024 Zidane sería entrenador del Bayern Múnich para la próxima temporada

Zócalo

|

     

Opinión

|

Información

< Opinión

 

Coahuila

Sara, la kikapú madre del Indio Fernández –I Parte-

Por Otto Schober

Hace 2 años

Adela Fernández y Fernández, la primogénita de Emilio Fernández Romo, mejor conocido como El Indio, director, actor y productor de cine, protagonista de la llamada Era de Oro del Cine Mexicano, escribió un libro sobre la vida de su padre El Indio Fernández, Vida y Mito, en donde El Indio reconoce que su mote, le viene por su sangre materna (kikapú), que reconoce que su padre Emilio Fernández Garza tuvo autorización de los kikapú para casarse con su madre Sara Romo, gracias al trato estrecho que (éstos) han tenido con el régimen mexicano, decía, que los kikapúes son poco sociables, que no permiten con facilidad que personas ajenas a su grupo entren a sus reservaciones, no permiten enlaces con personas ajenas a su pueblo con el propósito de conservar la pureza de la etnia. 

Decía: “Prácticamente se la robó, aunque formalizaron el casamiento por las leyes mexicanas”. Al Indio no le gustaba hablar de su madre porque con ella se vincula la traición y el crimen. Sobre esto dijo: “Tenía yo 9 años cuando encontré a mi madre con otro hombre, mientras mi padre estaba peleando por la causa revolucionaria, agarré la carabina y maté aquel hombre y me fui a vivir a la bola y a partir de entonces, todo fue puro balazo y pura muerte”. En otra ocasión dijo: “El tipo que estaba con mi madre y al que maté, era un terrateniente, el amigo de éste, en venganza, mató a mi madre”. Adela Fernández dice en su libro: “Lo cierto es, que Sara Romo también salió huyendo, de haberse quedado, le hubieran hecho juicio a mi padre, no pudo regresar con los kikapú porque estaba excluida de la comunidad”. 

Se supone que estos acontecimientos ocurrieron en 1913, cuando El Indio tenía 9 años de edad y decía que peleó con Felipe Ángeles, que participó en la batalla de Torreón, San Pedro, Paredón y Zacatecas. Que ingresó al Colegio Militar donde obtuvo el grado de coronel en 1919. En los libros de historia del Colegio Militar, fundado en 1823, están los listados de quienes han formado parte del Colegio desde su fundación y en ninguno aparece el nombre de Emilio Fernández Romo, sólo el de Jorge Negrete. Lo único que se puede comprobar de su mencionada vida militar es que estudió en la escuela militar de aeronáutica, pero no en el Colegio ni el grado de coronel. Sobre el origen kikapú de su madre, los investigadores genealógicos, teniente coronel Ricardo Raúl Palmerín Cordero y su esposa Gloria Martha Pérez Tijerina, encontraron evidencias en los libros del Registro Civil de Hondo, Coahuila, que el 16 de marzo de 1904 nació Emilio Fernández Romo, que sus padres fueron Emilio Fernández Garza y Sara Romo, en cuanto a sus abuelos paternos, sólo aparece Emilio Fernández Martínez, y los maternos, Jesús Romo y Josefa Bustamante. Mientras Adela Fernández afirma en su libro que sus abuelos se casaron en Hondo, Coahuila, Ricardo Palmerín no encontró ninguna evidencia en ese lugar, sólo del matrimonio de Ana Fernández Garza, hermana de su padre, fechada el 5 de marzo de 1904, cuando contrajo nupcias con Eduardo Castañeda, pero sí de que los padres del Indio se casaron en San Antonio, Texas, el 12 de junio de 1903. (Conferencia Emilio Indio Fernández de Ricardo Palmerín, Múzquiz, Coahuila. 14 de marzo de 2015).

Notas Relacionadas

Colapsa a Saltillo lluvia bendita; ¡se nos cayó el cielo!

Hace 11 horas

Maestros que Dejan Huella: Alicia de la Peña; ‘debe IA ser una herramienta no un enemigo’

Hace 11 horas

México puede estar condenado a no crecer

Hace 11 horas

Más sobre esta sección Más en Coahuila

Hace 11 horas

México puede estar condenado a no crecer

Hace 11 horas

Saludo amenazante

Hace 11 horas

Seguridad dispareja