Texas.- Un policía de raza blanca de Texas se entregó este viernes y enfrenta cargos de asesinato por balear de muerte a un adolescente afroamericano tras ser despedido por el incidente.

Roy Oliver, de 37 años, se dirigió el 29 de abril en compañía de un colega a Balch Springs, en la periferia de Dallas, tras haber sido alertado de la presencia de menores ebrios.

Jordan Edwards, de 15 años, y otros cuatro jóvenes salían de una fiesta en un coche después de haber oído disparos.

Oliver disparó entonces contra el vehículo, alcanzando al adolescente en la cabeza. Desde entonces, el policía se encontraba en paradero desconocido.

El hecho generó protestas que pedían cargos para el policía. Cerca de 200 personas acudieron a una vigilia el jueves por la noche en Balch Springs.

El exagente se entregó el viernes en la noche, apenas horas después de que la policía del condado Dallas emitiera una orden para su arresto.

En el comunicado en que se anunció la orden de arresto, la policía señaló evidencia que indica que Oliver “intentó causar lesiones corporales graves y cometer un acto claramente peligroso para la vida humana que causó la muerte”.

Oliver fue liberado posteriormente tras depositar una fianza en la cárcel del condado Parker en Weatherford, a unas 150 kilómetros al oeste de Dallas. Su fianza había sido fijada en 300 mil dólares.