Saltillo, Coah.- Anécdotas son muchas, vidas agradecidas son aún más. En 37 años de trayectoria como cardiólogo, Luis Tláloc Córdova Alveláis ha dejado ya su huella por su compromiso con la medicina y con la gente.

Ayer, el compromiso y la ética del mejor cardiólogo de Coahuila fueron reconocidos por la Sociedad Mexicana de Cardiólogos. Córdova Alveláis recibió una placa que honra sus casi cuatro décadas como médico.

El doctor, que llegó a Saltillo con la instrucción de arrancar la sala de terapia intensiva de la Clínica Numero 2 del IMSS, expresó con voz entrecortada sentirse orgulloso y agradecido por el homenaje.

Recordó que pisó por primera vez la ciudad en 1980, cuando no había prácticamente nada, porque en el área de cardiología sólo existían las electrocardiografías y placas de tórax, sin embargo, en años venideros comenzó un desarrollo vertiginoso.

Para todos

Breve, preciso y con un toque humano, así lo definen sus colegas. Su inteligencia se aprecia en las historias clínicas que escribe, demostrando su capacidad de síntesis; plasma cuadros clínicos breves, siempre buscando economizar el tiempo, que en esta profesión es primordial para ganarle la carrera a la muerte, afirman.

“Lo más hermoso que he vivido en estos 37 años es el dar clases, una de las cosas que más me apasionan. Otra es atender a mis pacientes. He tenido el privilegio de atender a pacientes muy humildes y a personalidades de Saltillo”, dijo.

A un mes de su llegada conoció al Gobernador de Coahuila, Óscar Flores Tapia, anécdota que conserva en su corazón.

“Iba a hacer un procedimiento a un familiar suyo y él se metió, le dije ‘se sale usted’. Me dijo ‘¿que no sabe usted que soy el Gobernador?’ Le dije: ‘¿Usted no sabe que soy el cardiólogo?’ No se quería salir. Yo me quité los guantes y le dije a la enfermera que le diera unos guantes para que él hiciera el procedimiento. Se tuvo que salir, furioso, y me dijo ‘Más te vale que todo salga bien’. Al siguiente día me invitó a desayunar a su casa”, recordó.

Defensor

No sólo en la medicina ha dejado huella, Luis Córdova es un mexicano valeroso pues critica y reclama siempre buscando el bien de su comunidad. Tal es su compromiso con la sociedad que junto a Carlos Ramos del Bosque fundó el primer grupo de defensa de derechos humanos. Además precedido por el obispo Raúl Vera formó el Centro Diocesano para la Atención de Derechos Humanos.

Hoy, a sus 37 años de trayectoria, Córdova Alveláis agradece a la vida haberle dado la oportunidad de hacer no sólo su trabajo, sino hacer lo que más le gusta, que es ejercer la medicina. Orgulloso dijo que Saltillo es una de las ciudades que está a la vanguardia en la cardiología de México.

“En la actualidad son muy pocas las cosas que no se pueden hacer en Saltillo comparadas con las que se pueden hacer en la ciudad de México”, concluyó el cardiólogo para subir al estrado por su placa de reconocimiento.