Saltillo.- A iniciativa de Martha Garay Cadena, se aprobó una reforma al Artículo 8 de la Ley de los Derechos de las Personas Adultas Mayores, para que “ninguna persona adulta mayor podrá ser socialmente marginada o discriminada en ningún espacio público o privado por razón de su origen étnico o nacional, el género o la edad”.

Tampoco “por las discapacidades, las condiciones de salud, la religión, las opiniones, las preferencias sexuales, el estado civil o cualquier otra que atente contra la dignidad humana y tenga por objeto anular o menoscabar sus derechos y libertades”.

Coahuila enfrenta un proceso de envejecimiento y crecerá la población de adultos mayores con mayor expectativa de vida, que es de 22.9 años y de 20.9 años a partir de los 60 años para mujeres y hombres.

“Lo anterior representa una conquista para la medicina, pues el incremento en la expectativa de vida en los últimos años ha sido exponencial. Sin embargo, no sólo es necesario aspirar a aumentar la expectativa de vida, sino, además, incrementar la calidad de la misma”.

En ese sentido, la comunidad internacional ha reaccionado a este fenómeno y ha llamado su atención la necesidad de generar las condiciones que permitan dignificar el proceso de envejecimiento, a partir de una mayor protección y garantía de los derechos fundamentales de las personas adultas mayores.