México.- El 10 de noviembre, cuando el presidente Felipe Calderón designó a Fernando Gómez Mont Urueta secretario de Gobernación, en su discurso de bienvenida elogió más su labor como panista que como funcionario público.

El “abogado independiente”, como lo llamó en ese momento el presidente, llegaba a su nuevo puesto avalado más por su trayectoria en Acción Nacional que de servicio público.

Calderón destacó el paso del abogado como miembro del Comité Ejecutivo Nacional, es decir la dirigencia panista, así como integrante del Consejo Nacional, órgano al que sólo pertenecen los panistas distinguidos y que decide a la dirigencia del PAN, y de la Comisión Política del blanquiazul.

Asimismo, el titular del Ejecutivo mencionó que Gómez Mont como diputado federal en 1991 ocupó la presidencia de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados durante la LV Legislatura.

También se refirió a que fue miembro de la Comisión Federal Electoral y representante durante varios años del PAN ante el Instituto Federal Electoral.

Era un panista de corazón.

“Abogado de amplia trayectoria, Gómez Mont se ha destacado por su honestidad profesional y su vocación política; ha sido un promotor de reformas constitucionales en materia de justicia, seguridad pública”, dijo Calderón sobre la manera de actuar de Gómez Mont.

Cuando sustituyó a Juan Camilo Mouriño, el PAN celebró su llegada y se refirió a él como “alguien comprometido con la rendición de cuentas y derechos humanos, así como en el ámbito electoral”.

Poco más de un mes después de ser designado como secretario de Gobernación, en diciembre Gómez Mont fue aceptado por unanimidad como miembro del Consejo Nacional. Refrendaba su militancia panista.

Su trayectoria partidista hoy se truncó, con el anuncio de su renuncia al partido que su familia ayudó a fundar.